IU denunciará al director de Marina Mercante por coacciones a un testigo del alejamiento del 'Prestige'

El Tribunal Superior de Justicia de Galicia ha anulado por falta de motivación una suspensión de empleo y sueldo impuesta por el director general de Marina Mercante, José Luis López-Sors, al jefe de la inspección marítima de A Coruña, Fernando Balbás, tras aceptar comparecer como testigo de IU en el sumario del Prestige. IU ha elaborado una querella contra el alto cargo de Fomento por coacciones al testigo. Su comparecencia ante el juez que investiga la mayor tragedia ecológica española sólo está pendiente de fijar una fecha.

Marina Mercante sólo explicaba lo siguiente sobre las causas de la apertura del expediente a este funcionario: "Teniendo esta dirección general conocimiento de determinados hechos que afectan a la inspección marítima de A Coruña, el 12 de diciembre de 2003 acordó realizar una información reservada", de la que resultaron unos "comportamientos irregulares". El expediente citaba seis faltas de Balbás: "Abuso de autoridad en el ejercicio del cargo; grave desconsideración con los superiores, compañeros o subordinados; no guardar el debido sigilo respecto a asuntos que se conozcan por razón de su cargo cuando causen perjuicio a la Administración o se utilice en provecho propio; grave perturbación del servicio; atentado grave a la dignidad de los funcionarios o de la Administración, y grave falta de consideración con los administrados". Y no concretaba más.

Amén de abrirle expediente, López-Sors decretaba su suspensión de empleo y sueldo durante la tramitación. Las resoluciones se tomaron el 5 de febrero de 2004, tras pedir IU el 22 de enero su testimonio.

La Sala de lo Contencioso del Tribunal Superior de Galicia ha anulado dicha suspensión porque la resolución "carece por completo de motivación justificadora de la decisión". "Es evidente que en el fondo del debate late algo más que un mero conflicto estrictamente funcional. Si así no fuere, no comprende esta sala que se pueda fundamentar una medida provisoria de esta naturaleza en tan vagos, inconcretos e indeterminados motivos como los que se recogen en el acuerdo recurrido", dice el auto.

IU, con este respaldo jurídico, ha redactado ya una querella contra López-Sors por considerar que vulneró el artículo 464 del Código Penal, que sanciona a quien "con violencia o intimidación intentare influir directa o indirectamente en quien sea denunciante". Y une a esta acusación que este alto cargo dictó tan "arbitraria" resolución "a sabiendas de su injusticia". La potencialidad del testimonio de Balbás en el sumario del Prestige se ciñe a lo siguiente: López-Sors asegura que ordenó el alejamiento del petrolero el 14 de noviembre de 2002, tras diversas consultas técnicas. IU sostiene que Balbás conoció por Ángel del Real (entonces capitán marítimo de A Coruña) a las 21.30 del 13 de noviembre de 2002 que López-Sors había ordenado ya el alejamiento del buque.

"De ser cierta tal información, el dato tendría extraordinaria trascendencia, pues acreditaría que, tal y como sostienen mi representada y otras acusaciones populares, la orden en cuestión habría sido adoptada sin ningún tipo de consulta o dictamen técnico que la amparase", concluye IU.