El 80% del sector de la cooperación reclama un ministerio específico

Debe crearse un Ministerio de Cooperación, que supere la actual fragmentación entre Economía, Asuntos Exteriores y Defensa. Así opina un 80% del sector en la primera encuesta realizada en España sobre el estado de la cooperación, presentada ayer por la Asociación de Profesionales por la Calidad de la Cooperación (ACADE). El 97% ve insuficientes los recursos del Gobierno para cooperación. Como objetivo para la próxima legislatura, el 49% pide que la ayuda oficial se sitúe entre el 0,33% y el 0,7% del PIB (hoy es el 0,25%).

"Era básico saber la percepción del sector, sea de ONG, Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI), administraciones autonómicas y locales, universidades, organismos internacionales, empresas y consultoras", explica José Antonio Alonso, presidente de ACADE y director del Instituto Complutense de Estudios Internacionales.

"Una sorpresa es la reivindicación de un Ministerio de Cooperación, complementada por ese 61% que quiere que la AECI no la gestionen diplomáticos, sino una mezcla de funcionarios y profesionales de la cooperación". En todo caso, un 70% se inclina por reducir el peso de Economía.

Un 55% dice haber hecho al menos un master en cooperación. "Parece indicar que el sector valora tener más formación, por lo que cabe considerar que la Universidad debería ofrecer una carrera específica", dice José Ángel Sotillo, de la junta directiva de ACADE y catedrático de Economía Aplicada de la Complutense. En lo laboral, el 72% ve insatisfactorios los contratos del personal expatriado y un 81% considera malas las condiciones de regreso.

Los encuestados son muy críticos con el Gobierno. El 78% afirma que la voluntad de diálogo de la Administración actual ha sido mala o muy mala. Un 55% califica de baja la implicación del Parlamento en cooperación y un 34% la ve muy baja e irrelevante.

La primera condición que un 65% pone para que un país reciba ayuda es que ese gobierno luche en firme contra la pobreza, y un 60% estima precisas las garantías de que la ayuda llega a los destinatarios; sólo un 14% cree prioritario que dicho país celebre elecciones democráticas: la erradicación de la pobreza es lo primero. Un 89% cree que el Gobierno español debe prestar más atención a eliminar la miseria, y sólo un 3% aboga por primar los intereses en política exterior. Sobre la orientación geográfica de la ayuda oficial, un 68% insta a priorizar a los países más pobres, y sólo un 12% acepta mantener los actuales criterios, que prefieren áreas como Latinoamérica.

La encuesta mide el papel de los actores. El mayor acuerdo está en el protagonismo de universidades (89%), grupos de base (86%) y ONG (81%). Un 50% piensa que debe crecer la participación de empresas y consultoras. En cuanto a las ONG, resulta curioso que mientras la mayoría de los recursos van a proyectos, los encuestados sólo valoran eso en un 12% y en cambio un 24% ve como tareas que debieran ser preferentes las de movilización, campañas y construcción de redes Norte-Sur.