Aznar cree que el recorte del programa del PSOE lo convierte en un dislate

El presidente del Gobierno, José María Aznar, se despidió ayer de los dirigentes y militantes de Unión del Pueblo Navarro (UPN), la versión del PP en esa comunidad foral, con duras descalificaciones hacia los socialistas. Aznar les acusó de recortar tanto su programa electoral, respecto de la versión difundida las pasadas navidades, que han convertido sus actuales propuestas en un "puro disparate" sin credibilidad alguna.

Aznar dijo que los socialistas están dispuestos a abrir una revisión constitucional "que echará a perder el progreso" acumulado en España en los años de gobierno del PP y ahuyentará a los inversores internacionales.

Poco antes de compartir con los miembros del Gobierno foral y unos 400 simpatizantes populares navarros un almuerzo en Cintruénigo, Aznar subrayó que los anuncios electorales del candidato socialista a la Presidencia del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, son "un programa recortado" sobre el ya anunciado por los socialistas las pasadas Navidades. Y añadió: "Yo le digo a Mariano [Rajoy]: '¡Invéntate algo!, porque enfrente no hay nada, y a España eso no le conviene, sino que le conviene tener algo sólido, como nosotros".

Ante un auditorio entregado, Aznar repitió los latiguillos que viene utilizando en la precampaña, relativos a que el partido socialista "no tiene líder, ni programa, ni un proyecto de país, sino 17 distintos, haciendo todos los pactos extravagantes del mundo para gobernar, y con una clara tendencia a empeorar", vaticinó.

El presidente dijo haberse quedado "extrañado" al contemplar cómo el PSOE ha "recortado" las propuestas que adelantó "en Nochebuena, Navidad y el día de los inocentes".

Como ejemplo de esos recortes, Aznar subrayó que "el prometido presupuesto cultural del 1% se queda ahora en el 0,4%; los cuatro años para alcanzar la media europea en gasto educativo se convierten en ocho; se suprimen anunciados beneficios fiscales; ya no asume el cambio de sexo comprometido como prestación sanitaria; se anula el salario del estudiante; no se ofrecen plazos para acabar con la energía nuclear y se anulan la vicepresidencia cultural y los observatorios para la marginalidad y la pobreza".

"No se puede ser tan torpe", exclamó Aznar, "ni aun estando dirigido por el enemigo". Para el presidente español, la reducción de las ofertas socialistas "es algo nunca visto" en España.

Volvió el presidente a recordar la entrevista de Josep Lluis Carod con los terroristas de ETA para afirmar que el mantenimiento de los pactos del PSC con Esquerra Republicana de Catalunya son "una vergüenza" similar a la aceptación de los votos de algunos partidos nacionalistas que dieron a los socialistas navarros destacadas alcaldías de la región.

En materia de terrorismo, Aznar respondió al secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, que ha advertido que la inseguridad tiene raíces en la pobreza y la desesperación. "ETA y Bin Laden no tienen nada que ver con la marginación ni con la pobreza. Que miren bien el mapa, para ver que el hambre y la pobreza no generan terrorismo, sino que los padres de todos los terrorismos son el fanatismo, el fundamentalismo y la debilidad de algunos", afirmó. Y agregó que el PP "terminará" con los violentos.

Aznar disfrutó por la mañana de visitas protocolarias en Pamplona, donde los arquitectos Rafael Moneo y Patxi Mangado le explicaron detalles de los edificios del Archivo General y el Baluarte, que Aznar visitó acompañado del presidente de Navarra, Miguel Sanz, y de la alcaldesa de Pamplona, Yolanda Barcina.