_
_
_
_
NOTICIAS Y RODAJES

'Balseros', de La Habana a Hollywood

El documental dirigido por Carles Bosch y Josep Maria Domènech sobre el sueño americano de siete emigrantes cubanos es la única película española candidata al Oscar

Quién les iba a decir en el verano de 1994 a los reporteros Carles Bosch y Josep Maria Domènech, enviados especiales a La Habana por su empresa, TV-3, para cubrir la llamada crisis de los balseros que, 10 años después, la sobrecogedora crónica en imágenes que estaban escribiendo sobre aquellos hombres y mujeres tan fascinados por el sueño americano que eran capaces de lanzarse al mar acabaría compitiendo en Hollywood por un Oscar, el que la Academia otorga al mejor largometraje documental? Claro que, para que los dos periodistas de la cadena autonómica catalana acaben pisando el próximo 29 de febrero la alfombra roja del teatro Kodak de Los Ángeles, han tenido que pasar muchas cosas.

La primera y principal es que ambos quedaran atrapados sin remedio por la fuerza de la historia. Eso les condujo algún tiempo después a querer saber más acerca de la aventura de siete de los cubanos que habían conocido preparando las improvisadas lanchas con las que pensaban llegar a Florida. Eran Óscar, Rafael, Míriam, Guillermo, Juan Carlos, Misclaida y Méricys. Sus pesquisas les orientaron hasta Guantánamo, donde los seis primeros balseros habían sido recluidos tras ser interceptadas sus embarcaciones por guardacostas estadounidenses, y allí los volvieron a entrevistar y a filmar. Méricys había naufragado cerca del malecón y regresado a casa. También a ella la fueron a ver. Este material dio para un nuevo reportaje televisivo, pero Bosch y Domènech, que continuaron en contacto con los siete protagonistas de sus reportajes, necesitaban más. Les faltaba un desenlace: explicar qué había sido de sus balseros en Estados Unidos, donde finalmente se habían instalado esperando hallar el paraíso. Y, para completar su historia, la televisión se les había quedado demasiado pequeña. Así que buscaron la complicidad de la propia TV-3 y de una pequeña productora de cine, Bausan, para que les ayudara a trasladar Balseros a la gran pantalla. Los convencieron, y también a David Trueba, que firma el guión al lado de Bosch.

La película, que recorre pues la experiencia de los siete emigrantes cubanos desde que se convirtieron en balseros hasta conseguir la ciudadanía estadounidense, se estrenó en España en abril de 2002 y, tras itinerar por un circuito de festivales que la ha llevado a casi 70 ciudades de todo el mundo, llegó a los cines de Estados Unidos el pasado verano. El filme ha logrado una docena de prestigiosos premios, entre ellos el de la pasada edición del International Documentary Awards, considerado el Oscar de los documentales.

Balseros ha cubierto un trayecto colmado de éxitos, pero no fue hasta que el Festival de Sundance seleccionó la producción el año pasado y el equipo del documental allí desplazado vio cómo reaccionaba el público cuando los productores se plantearon seriamente emprender la carrera por el Oscar. Y en ella siguen, aunque desde el pasado martes están situados un poco más cerca de la codiciada estatuilla.

Ayer, TV-3 se transformó en un pedazo de Cuba para celebrar la candidatura de la película dirigida por dos de los reporteros más veteranos de la casa: 20 años hace que trabajan en ella, desde el principio. Los compañeros de Bosch y de Domènech les prepararon un escenario caribeño en el que no faltaron los mojitos, los frijoles negros, las velas y los santitos de escayola. Hasta un chrysler y un buick antiguos, como los que circulan por La Habana, se agenciaron. Bosch y Domènech estaban como en una nube. "Para nosotros, haber llegado hasta aquí ya es todo un triunfo", se sinceró Bosch. Y, respecto a los cuatro documentales que compiten con Balseros -todos de matriz estadounidense y con presupuestos infinitamente superiores a los 128 millones de pesetas que costó en su momento el filme español-, comentó: "A sus autores no los veo en absoluto como rivales, sino como compañeros de diversión. Si ellos están sufriendo por cuál va a ser el resultado de la votación es su problema, nosotros nos estamos divirtiendo mucho". Los contrincantes más serios de Balseros son:

The fog of

war, un relato de la guerra de Vietnam de boca del entonces secretario de Defensa, Robert McNamara, pero sobre todo Capturing the

Friedmans, un taquillazo en Estados Unidos que recoge la escalofriante historia de un padre y un hijo que ven cómo sus vidas se vienen completamente abajo tras ser acusados de pedofilia.

Bosch señaló que una virtud de Balseros de cara a ganar el premio es que aborda un tema universal: el de las personas que se ven obligadas a abandonar sus lugares de origen corriendo un gran riesgo, llámense balseros, espaldas mojadas o sin papeles. Junto a él estaba, escuchándole, la cantante Lucrecia, que aporta al filme con su música y su voz, señaló "la tristeza del exilio cubano", y destacó de Balseros precisamente "su universalidad". "Cuando estuve en Estados Unidos presentando la película", recordó, "tuve ocasión de oír a muchos estadounidenses salir del cine diciendo: 'balseros somos todos".

Durante el mes que falta para la gala de los Oscar, los productores de B

alseros quieren poner toda la carne en el asador para promocionar el filme en Estados Unidos "con iniciativas imaginativas", anunciaron Francesc Escribano (TV-3) y Loris Omedes (Bausan). De momento, aquí, este fin de semana vuelve a las carteleras de algunos cines, y el próximo llegará a algunos más.

Carles Bosch, en primer plano, y Josep Maria Domènech, ayer en los estudios de TV-3 junto a un viejo <i>buick</i> como los que aún circulan por La Habana<b>.</b>
Carles Bosch, en primer plano, y Josep Maria Domènech, ayer en los estudios de TV-3 junto a un viejo buick como los que aún circulan por La Habana.SUSANNA SÁEZ

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_