Maragall incluye sólo a cuatro mujeres en un Gobierno de fuerte peso municipalista

Primer decreto, primer incumplimiento. Pasqual Maragall firmó ayer el decreto del nuevo Gobierno y, en contra de lo que prometió en campaña, quedará muy lejos de la paridad de sexos. El nuevo Ejecutivo, que tomará posesión el lunes, incluye sólo a cuatro mujeres -el 23,4%- y tendrá un fuerte peso municipalista con la presencia de un nutrido grupo de ex alcaldes y ex concejales.

El Gobierno lo integran 17 personas -incluido el presidente y el conseller en cap-, una cifra nunca alcanzada por los ejecutivos de Jordi Pujol. De ellas, sólo cuatro son mujeres: Montserrat Tura (Interior), Marina Geli (Sanidad), Caterina Mieras (Cultura) y Anna Simó (Bienestar y Familia). Las tres primeras son socialistas, y la última, de Esquerra.

El Ejecutivo incluye a cinco ex alcaldes, entre ellos los de Girona, Lleida y Barcelona, y otros siete consejeros fueron antes concejales

Un nieto de Carrasco i Formiguera, fundador de Unió, se perfila como 'número dos' del departamento de Carod

El presidente de la Generalitat prometió en la campaña la paridad de sexos, pero las mujeres representan el 23%

Maragall se ha visto muy condicionado por sus socios de gobierno -Esquerra e Iniciativa-, que sólo han seleccionado a una mujer, cuando los puestos son ocho.Pero el PSC tampoco ha cumplido del todo la promesa, si bien el porcentaje de mujeres es superior: lo son tres de sus ocho consejeros (37,5%), aunque el porcentaje desciende hasta el 33,3% si se contabiliza también a Maragall. En el primer Gobierno de izquierdas, el porcentaje de mujeres es sólo dos décimas superior al del último de Jordi Pujol.

El nuevo Ejecutivo tampoco ha supuesto un avance para la integración en el Gobierno autónomo de los nacidos en el resto de España. Todos los miembros del Ejecutivo nacieron en comunidades de habla catalana: 15 en Cataluña, uno en la Comunidad Valenciana y una en las Islas Baleares.

Maragall, que celebró su nombramiento con una fiesta organizada por el PSC en La Farga de L'Hospitalet, cerró la composición de su Gobierno sin grandes sorpresas, aunque con algunos retoques de última hora. Asumió todos los candidatos sugeridos por Esquerra e Iniciativa, y mantuvo al núcleo duro de su equipo -Joaquim Nadal en Política Territorial y como portavoz, Antoni Castells en Economía, Montserrat Tura en Interior y Josep Maria Vallès en Justicia-. Finalmente, eligió a Marina Geli para Sanidad, a Antoni Siurana para Agricultura, a Caterina Mieras para Cultura y al sindicalista de UGT Josep Maria Rañé para Trabajo e Industria.

Nunca la sensibilidad municipalista había estado tan representada en el Gobierno de la Generalitat. El Ejecutivo incluye a ex alcaldes de tres de las cuatro capitales de provincia -Barcelona, Girona y Lleida- y los hasta hoy alcaldes de Mollet (Vallès Oriental) y Puigcerdà (Cerdanya), Montserrat Tura y Joan Carretero, respectivamente. Además, otros siete consejeros han sido antes concejales.

Durante las negociaciones para formar Gobierno se planteó que socialistas y republicanos compartieran responsabilidades en los departamentos de más peso, pero al final este esquema es sólo simbólico: se limita a que el PSC nombrará a un alto cargo de Enseñanza y los republicanos lo harán en Sanidad. ERC tiene ya muy avanzados los principales altos cargos para sus consejerías: Raimon Carrasco, nieto del fundador de Unió Democràtica Manuel Carrasco i Formiguera, se perfila como número dos de Carod, y Rafael Niubò, como secretario general de Deportes; Ramon Martínez, de Enseñanza, y Alfons Garcia, de Turismo.