El PSE rechazará el presupuesto porque da "soporte al 'plan Ibarretxe"

El grupo socialista fue ayer el primero en registrar en el Parlamento su enmienda a la totalidad a los presupuestos del Gobierno para 2004 pidiendo la devolución de las cuentas. El portavoz del grupo, Rodolfo Ares, argumentó su rechazo tanto en razones netamente políticas como sectoriales y de reducción del control parlamentario sobre la acción presupuestaria del Gobirno.Ares trató también de atajar la previsible acusación del Ejecutivo sobre los partidos de la oposicion constitucionalista sobre su coincidencia con Batasuna a la hora de rechazar las cuentas.

"El Gobierno está tratando de trasladar la responsabilidad de que Euskadi tenga presupuesto o no a la oposición", dijo, en lo califició de táctica "perversa y tramposa", ya que esa responsabilidad, en toda democracia, es del Gobierno, no de la oposición".

Ares afirmó que el Ejecutivo ha presentado un proyecto diseñado para conseguir el apoyo del grupo de la ilegalizada Batasuna o, en caso contrario, "jugar al victimismo para justificar una prórroga" y acusar a PSE y PP de derribarlos con los votos radicales. "Los socialistas nunca hemos buscado, ni buscaremos, esos votos, mientras que el tripartito sí ha llegado a muchos acuerdos con Batasuna", acusó. A continuación emplazó al lehendakari, Juan José Ibarretxe, a decir "con claridad" si va a prohibir a los grupos que sustentan su Gobierno pactar enmiendas con Sozialista Abertzaleak (SA).

El portavoz socialista justificó el rechazo global de su grupo a los presupuestos en su condición de "soporte del plan soberanista y rupturista" del lehendakari.

Ares criticó también los "descuentos unilaterales" del Gobierno en las liquidaciones del Cupo, y su anuncio de que los seguirá efectuando en el futuro para financiar "materias no transferidas" generan incertidumbre y tensión.

Menos control parlamentario

La enmienda socialista se justifica también en lo que Ares calificó de "exageradas" facultades del Ejecutivo al ejecutar y modificar las cuentas y habilitar y ampliar partidas presupuestarias. El portavoz entiende que el modo en que el Gobierno articula el presupuesto reduce la capacidad de control del Parlamento.

En políticas sectoriales, el PSE resaltó las insuficiencias del proyecto en materia de vivienda -para la que pidió un "esfuerzo extaordinario" que a su entender no existe- y de nuevas prestaciones sanitarias y sociales. Parecida crítica realizó en enseñanza: las cuentas para 2004 favorecen a los centros privados en detrimento de la escuela pública, para la que pidió más inversión. Denunció también la insuficiencia de recursos para la UPV y para la investigación.

SA presentó también su enmienda a la totalidad, pero se declaró dispuesto a la negociación con el Gobierno.