Antonio Prieto mezcla realidad y ficción en 'Una y todas las guerras'
Antonio Prieto cree que todos los libros participan en cierta medida de la biografía del escritor. Una y todas las guerras (Seix Barral), su nueva novela, en la que el protagonista recrea su paso por épocas cruciales de la historia universal, contiene también esa pequeña dosis de biografía. Uno de los capítulos, el titulado 'El mundo cortesano al saqueo de Roma', donde el cronista cuenta que le fue fácil encontrar trabajo en Londres porque hablaba de Cicerone, Virgilio o Platón como si fueran amigos suyos, responde muy bien a la actitud que como profesor mantiene Prieto con sus alumnos. "Como docente jamás he hablado de los autores como si estuvieran muertos; los libros se escriben cuando ellos están vivos", cuenta el escritor.
Para Una y todas las guerras, Prieto ha elegido los periodos históricos en los que se sentía más cómodo. El protagonista de la novela recuerda su participación en la guerra de Troya y su huida junto a Eneas, su amistad con Virgilio y la victoria de Octavio en Accio, el saqueo de la Roma papal de Clemente VII, las ejecuciones de Luis XVI y de Robespierre y la Segunda Guerra Mundial. "Es una novela un poco compleja, pero fácil de leer. Está escrita con el objeto de defender la cultura narrativa, que es un defecto del que adolecen muchos de los títulos nuevos", añade el escritor, que ha publicado numerosos libros de historia literaria y de teoría de la literatura.
Considera el autor de Tres pisadas de hombre, novela con la que ganó el Premio Planeta, que hay elementos comunes en todas las guerras que el paso del tiempo no ha modificado nada: el terror sobre la población civil, los intereses económicos y la vanidad de los hombres.
