Escuelas para formar cantera

Empresas como Repsol YPF, Mapfre o Viajes Marsans cuentan con centros de formación propios que funcionan como fuente de contratación de futuros empleados. Esta fórmula, importada de Estados Unidos, es nueva en España y todavía no permite la incorporación masiva de los alumnos a las empresas que imparten el curso. Es un complemento a las fórmulas tradicionales. De momento, el porcentaje de alumnos que luego trabaja en la propia compañía no supera, en la mayoría de los casos, el 30%.

"Estos centros tienen más que ver con mejorar la imagen de la empresa en la sociedad que con la contratación", explican desde Hay Group

Las empresas con escuelas de formación constituyen todavía casos singulares en el panorama laboral español. De momento, esta forma de captación de empleados es más un complemento a otras formas de selección tradicionales -como el anuncio en prensa o la entrevista- que un sustituto. Sólo en casos concretos, como la escuela que acaba de abrir Viajes Marsans, está garantizada la contratación tras superar el curso.

Por ejemplo, Repsol YPF tiene desde 1999 el Instituto Superior de la Energía (ISE), con sede en Móstoles (Madrid) y que depende de la Fundación Repsol. Este centro imparte masters en el sector energético y en el petroquímico, con precios que rondan los 12.000 euros, aunque también ofrece la posibilidad de acceder a becas.

Los cursos de Repsol son muy codiciados: a las pruebas de selección del año pasado se presentaron más de mil personas, sobre todo de España y Latinoamérica, de las que finalmente fueron seleccionadas cien. Repsol YPF incorporó después a 32 de estos alumnos en diferentes puestos de organización, tanto en España como en el extranjero.

Estas escuelas permiten que la empresa pueda conocer en profundidad al a lumno, pero la fórmula no garantiza que, a cambio del dinero que se paga por el curso, el estudiante vaya a incorporarse después a la compañía. "Estas escuelas de formación no suponen una amenaza a otras formas tradicionales de selección como el anuncio o la entrevista. Por el momento, tienen que ver más con mejorar la reputación de la empresa ante la sociedad; que se vea a la compañía como un ente responsable, cercano a la ciudadanía. De todas formas, esto no quita que los centros de formación también sean una forma de reclutamiento para las empresas", señala Enrique de Mulder, presidente de la consultora de Recursos Humanos Hay Group.

Otra de las empresas que imparten cursos de especialización es Mapfre (www.mapfre.es), a través de Fundacion Mapfre Estudios. El precio de los masters sobre seguros o riesgos laborales está entre los 5.000 euros y los 12.000. El 15% de los alumnos (2.300 al año) se incorpora luego a la compañía.

La fórmula de los centros de formación es prácticamente nueva en España. Una de las escuelas más veteranas es la que Garrigues, Abogados y Asesores Tributarios creó hace apenas diez años en Madrid. Un master en el Centro de Estudios Garrigues (www.centrogarrigues.com) cuesta 15.000 euros e incluye luego prácticas.

El porcentaje de incorporación de los alumnos que pasan por el centro a los despachos de Garrigues no es muy alto: desde 1994 han pasado más de 1.500 alumnos, de los que sólo 70 trabajan actualmente en alguna de las sedes que tiene la empresa. El resto, según Ángel Vizcarrando, director de la escuela, ha pasado por Garrigues y luego ha cambiado de trabajo o se ha incorporado directamente a otros despachos. "El centro Garrigues es una vía de formación más que una forma de selección, aunque como instrumento para contratar es muy bueno", explica Vizcarrando.

Como forma de captar empleados, Vizcarrando piensa que los masters de las compañías "siempre añaden un componente de buena formación". "Además, permiten un mejor conocimiento de los posibles candidatos", añade. El centro Garrigues pretende no ser una mera proyección del despacho. "Por eso, el 80% del profesorado no tiene vinculación con Garrigues", concluye Vizcarrando.