La ONU pone fin al programa Petróleo por Alimentos
La ONU traspasó definitivamente ayer a EE UU su programa humanitario en Irak, después de ayudar durante siete años a más del 60% de la población iraquí, unos 27 millones de personas.
El programa Petróleo por Alimentos, el de mayor envergadura jamás llevado a cabo por Naciones Unidas, un fondo de unos 8.200 millones de dólares, se puso en marcha en 1996 para paliar los efectos de las sanciones impuestas tras la guerra del Golfo. "En aquel momento nadie podía imaginarse que las sanciones durarían 13 años y tendrían incalculables consecuencias en millones de personas inocentes", subrayó el secretario general de la ONU, Kofi Annan, al despedir el programa en una sesión especial del Consejo de Seguridad, el pasado jueves.
El traspaso se llevó a cabo de forma progresiva a lo largo de los últimos meses, siguiendo la resolución 1.483 que poco después de la última guerra acabó con el embargo. El plan permitía al Gobierno de Sadam Husein vender crudo, bajo la estricta supervisión del organismo internacional, a cambio de comida y alimentos. Al controlar los ingresos del petróleo, la ONU se convirtió de hecho en el administrador del país generando entre 7.000 y 10.000 millones de dólares al año.
Contratos pendientes
La ONU ya ha transferido 3.000 millones de dólares al Fondo de Desarrollo para Irak, controlado por EE UU y el Reino Unido, y debía entregar ayer otros 2.000 millones. Quedan pendientes muchos contratos que el régimen de Sadam acordó con empresas internacionales y que se están renegociando. EE UU mantendrá, al menos de momento, los 44.000 puntos de distribución que la ONU tiene repartidos por todo Irak, especialmente en el no
rte.
Mientras, los pocos iraquíes que conocen la noticia del fin del programa esperan que su situación no empeore. Cuando Um Husam fue a recoger su ración mensual de alimentos la semana pasada, ni ella ni Mustafá, el distribuidor, tenían noticia de que fuera a suspenderse el programa, informa Ángeles Espinosa desde Bagdad. Este tendero de Karrada, un barrio de clase media bagdadí, es uno de los 28.000 agentes que han ayudado a la ONU a distribuir las raciones alimenticias.
Para tranquilidad de todos los afectados, el Ministerio de Comercio anunció el pasado jueves que "el sistema de racionamiento se prolongará hasta 2004". En una conferencia de prensa, Yusef Mohsen Abdul Rahmán, consejero del ministro, informó de que se van a mantener los contratos firmados por el régimen anterior para proveer grano a Irak. "El Ministerio fijará las nuevas cantidades de acuerdo con el Consejo de Gobierno y la Autoridad Provisional de la Coalición", añadió.
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