La Feria de Madrid y el espacio 'Un libro, una vida', premios al Fomento de la Lectura

La Feria del Libro de Madrid y el espacio de Televisión Española Un libro, una vida ganaron ayer el Premio Nacional al Fomento de la Lectura 2003 del Ministerio de Educación, Cultura y Deportes. Este galardón no tiene dotación económica y reconoce el papel que diferentes personas y entidades, especialmente los medios de comunicación, "pueden desempeñar en el fomento del hábito lector y en la transmisión de una imagen de la lectura como una actividad cultural positiva, útil y placentera".

En la distinción otorgada a la Feria del Libro de Madrid, el jurado destacó la actividad cultural de este certamen que, según se afirma en el fallo, en 2002 impulsó "su dimensión cultural, su acercamiento a los niños y jóvenes y el acceso de todos a la lectura".

El director de la feria, Antonio Albarrán, declaró ayer que el premio confirma una de las líneas en las que el encuentro editorial viene trabajando y que consiste en sacar del libro todo lo que tiene de elemento cultural y mágico para los ciudadanos. "Para nosotros es muy importante hacer gozar con el libro y todo lo que le rodea, de tal manera que incluso aunque vayan a la feria en el parque del Retiro y no compren libros, no importa; lo que interesa es que sepan disfrutar con el encantamiento que tiene el libro y después serán grandes lectores".

Para Albarrán, el hecho de que los niños puedan ir a la feria y divertirse en el pabellón infantil con los personajes de los cuentos europeos, como este año bajo el eslogan de Las tres culturas, "es fundamental, porque así se inician de una forma divertida en el conocimiento y el amor por los libros, y por ahí seguiremos trabajando".

Eficacia

Respecto a los microespacios Un libro, una vida, que se emitían en el telediario de las 21.00 de TVE-1, durante la primavera de 2002 (y también en la de este año), el jurado resaltó su "planteamiento plural de la lectura" y "su eficacia como acción de fomento de la lectura al difundirse en un medio y en un horario de máxima audiencia". En estos reportajes, cuyo responsable fue José Antonio Pérez Piñar, aparecieron desde taxistas, pastores o trabajadores de fábrica hasta cantantes, toreros, futbolistas o modelos que contaban qué tipo de libros les gustaba, por qué leían y de dónde sacaban tiempo para hacerlo.

El jurado estuvo presidido por el director general del Libro, Fernando de Lanzas, y compuesto además por Ana María Navales Viruete; Antonio Basanta Reyes, de la Fundación Germán Sánchez Ruipérez, galardonados en la anterior edición; José María Torre Cervigón, Federico Sánchez Aguilar, Manuel Ortuño Armas, Amalia Bautista Malillos, Fernando Armario Sánchez, Francisco Salas Pérez y Teodoro Sacristán Santos.