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La línea 9 del metro se financiará con un préstamo de 1.500 millones

La Generalitat firma un contrato con La Caixa, BBVA y SCH

Blanca Cia

La línea 9 del metro se financiará con un préstamo de 1.500 millones de euros a 30 años pero sin determinar el tipo de interés. Esas condiciones fueron las que ayer se firmaron en un precontrato de financiación suscrito entre el Departamento de Economía y el de Política Territorial con la Caixa, BBVA y Santander Central Hispano (SCH) que aportarán los 1.500 millones a partes iguales.

La línea 9 de metro supone una inversión de unos 3.000 millones de euros, aparte del coste de los trenes, cuestión que todavía no está cerrada.

La cifra del precontrato firmado ayer supone prácticamente la mitad del coste y el resto del importe procederá de créditos del Banco Europeo de Inversiones (BEI), por 1.300 millones de euros y de las aportaciones de la Generalitat, que ascenderán a 200 millones más.

El consejero de Economía, Francesc Homs, explicó que los fondos se pedirán "a medida que se necesiten" pero a partir del momento en que GISA -la empresa pública encargada de construir la línea- entregue la obra a Infraestructuras Ferroviarias de Cataluña (ICF), que será la propietaria de la línea. La posterior gestión se determinará despúes de convocar un concurso. En el precontrato firmado no se fijó el tipo de interés: "Los iremos negociando a medida que se necesite", puntualizó Homs. Matizó que se tratará de tipos similares a los del BEI, que suelen ser muy bajos.

Según una nota de la Generalitat, la empresa ICF para hacer frente a la carga financiera que supone el endeudamiento "explotará la infraestructura, lo que le permitirá obtener ingresos suficientes para cubrila". Una fuente de ingresos serán los que generen distintos operadores, como aparcamientos, bares-restaurantes o quioscos que, según Homs, "generarán un volumen de negocio que asegure el retorno de la inversión".

La optimista visión del sistema de financiación de Homs fue replicada de inmediato por el Ayuntamiento de Barcelona. En concrteto, por Xavier Casas, primer teniente de alcalde, para quien el mecanismo de endeudamiento repercutirá en el canon del servicio: "Esto es un peaje sobre el transporte a la sombra porque el sistema elegido de financiación repercutirá en el precio de la tarifas, por un lado, y en las aportaciones de los ayuntamientos, por otro".

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Casas se mostró muy crítico porque, en su opinión, el resultado de esa fórmula es que el endeudamiento de la Generalitat lo acabarán pagando los usuarios del transporte público y los ayuntamientos "cuando a quien corresponde sufragar las inversiones de metro es al Gobierno catalán, en dos terceras partes, y al Estado, con el resto".

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Sobre la firma

Blanca Cia
Redactora de la edición de EL PAÍS de Cataluña, en la que ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en diferentes secciones, entre ellas información judicial, local, cultural y política. Licenciada en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona.

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