Blair presidió la reunión en la que se decidió identificar a David Kelly

El primer ministro británico, Tony Blair, presidió una reunión en la que se decidió identificar al científico David Kelly como fuente de la polémica noticia de la cadena BBC sobre Irak, según afirmó ayer Kevin Tebbit, secretario permanente del Ministerio de Defensa. Tebbit compareció en el Tribunal de Justicia de Londres ante el juez Brian Hutton, que investiga las circunstancias que rodearon la muerte de Kelly, experto en armas iraquíes y asesor de Defensa.

El científico aparentemente se suicidó el pasado 17 de julio, después de que su departamento divulgase su nombre como la fuente de la noticia del periodista de la BBC Andrew Gilligan, que acusó al Gobierno de exagerar pruebas sobre las armas de destrucción masiva para justificar la guerra en Irak.

Aunque el juez dio por terminadas las comparecencias de testigos en septiembre, Tebitt testificó ayer porque no pudo declarar en su día debido a una operación médica. El alto cargo de Defensa indicó que Blair participó en una reunión en su despacho de Downing Street, a partir de la cual se decidió que el Ministerio de Defensa confirmaría el nombre del experto a cualquier periodista que preguntase por él como fuente de Gilligan.

Tebitt fue interrogado por el abogado de la familia de Kelly, Jeremy Gompertz, sobre el "cambio de postura" de Defensa, que en un principio creía que "no había nada que ganar" con la identificación del experto. "El cambio de postura, como usted lo llama, fue el resultado de una reunión presidida por el primer ministro", respondió el testigo. En su declaración del 28 de agosto ante Hutton, el propio Blair eludió mencionar ese encuentro y se limitó a afirmar que Kelly fue identificado por varios funcionarios del Gobierno y subrayó que él no tomó esa decisión personalmente, aunque fue "correcta".

Tebitt negó que hubiese una "estrategia maliciosa" por parte del Gobierno británico para publicar el nombre del científico y rechazó que éste estuviera sometido a una "presión intolerable", tal y como mantiene el abogado de la familia Kelly.