Casi 300 alumnos no pueden comenzar el curso por falta de plazas

"Caben todos", se volvió a repetir ayer desde el Departamento de Enseñanza, donde se subrayó: "No puede haber ningún niño sin plaza, entre otras cosas porque sería ilegal". Esta afirmación, sin embargo, no desmiente los datos aportados por los sindicatos, que alertaron de que ayer casi 300 niños y jóvenes de diversos municipios no pudieron incorporarse a la escuela en el primer día de curso por no tener aún plaza asignada.

Tanto CC OO como USTEC-STE lamentaron no poder dar una cifra exacta del número de alumnos que se quedaron sin clase, ya que ayer las comisiones de matriculación de varios centros escolares estaban todavía "intentando colocar" a estudiantes, explicó Josefina Pujol, secretaria general de Enseñanza de CC OO de Cataluña.

A pesar de la falta de información, los sindicatos aportaron algunos datos: CC OO señaló que 50 alumnos de Vilafranca del Penedès no tenían plaza ayer, así como 27 de Mollet, y unos 100 más entre Badalona, Santa Coloma y L'Hospitalet de Llobregat. El sindicato añadió que algunos centros de Terrassa, Sabadell y el Maresme también sufren incidencias al respecto. Los datos de USTEC-STE reflejan que 70 niños no pudieron acudir ayer a clase en Mataró por no tener todavía una plaza asignada, y en Vic 50 niños se encontraron en idéntica situación.

"El Departamento de Enseñanza debería haber previsto esta situación y haber dado instrucciones a los centros, que a lo largo del verano han recibido miles de peticiones de matriculación", aseguró ayer Carles Martínez, portavoz de USTEC. Según Martínez, la masificación de las aulas "empieza a recordar a la situación de las décadas de 1970 y 1980", por lo que criticó la "falta de previsión" de Enseñanza y "la falta de voluntad política" para "solucionar el problema de cómo acoger a la población inmigrante".

Martínez también apuntó que entre 7.000 y 8.000 alumnos han solicitado una plaza escolar durante este verano. Entre ellos citó 140 alumnos del Maresme Nord, 140 de Mataró, 110 de Terrassa, 70 de Rubí, 400 de L'Hospitalet y un millar en Girona. Según el portavoz de USTEC, "Enseñanza debería tomarse más en serio este tipo de situaciones, porque la escuela es la primera herramienta para la integración, y ahora mismo muchos centros empiezan a estar masificados". Y es que los datos indican, además, que son numerosos los colegios que superan el límite máximo de alumnos por aula, que es de 25 en preescolar y primaria, y de 30 en secundaria.

Desde este sindicato subrayaron ayer que la legislación vigente permite aumentar estas ratios en un 10% como medida excepcional, "pero el problema es que ahora ya está absolutamente normalizado que hayan clases con 27 o 33 alumnos".

La consejera de Enseñanza, Carme-Laura Gil, que reconoció el pasado viernes que algunas aulas "pueden estar llenísimas" este nuevo curso, aseguró ayer que el primer día de clase se inició "con total normalidad y sin incidencias".

1.300 profesores más

Según el departamento, para hacer frente al aumento de matriculaciones para este curso se han incorporado a los colegios 1.300 profesores más y se han llevado a cabo numerosas construcciones de nuevos centros.

La previsión para este nuevo curso 2003-2004 es de 1.037.624 alumnos en Infantil, Primaria y Secundaria, 26.498 más que el año pasado. Según datos del departamento, 17.000 de los nuevos incorporados son inmigrantes, con lo que representan el 7,1% de la totalidad de la población escolar. En el primer año en el que se aplica la nueva política de evaluación de la Ley de Calidad, que estipula que los estudiantes de ESO deberán repetir curso si suspenden más de dos asignaturas, la consejera Carme-Laura Gil, en declaraciones a Ràdio 4, defendió una vez más una evaluación más " integradora y global", y "menos sesgada" y afirmó que será el claustro de profesores el que tendrá la última palabra sobre las calificaciones en el expediente.