El incendio de un petrolero inunda de crudo y humo el río Volga

El incendio desatado el sábado pasado en el petrolero Victoria, que se encontraba en el muelle de Oktiabrsk, ciudad a orillas del Volga, amenaza con causar una catástrofe ecológica en el importante río ruso. Un gran mancha de crudo -más de un kilómetro de longitud- cubría ayer el Volga, mientras Oktiabrsk permanecía envuelta en una nube de humo negro que dificulta la respiración de la gente.

Después de dos días de lucha contra las llamas, los bomberos no habían logrado apagar ayer el incendio, que se encuentra a menos de 300 metros de las primeras casas. Más de 250 metros de la orilla del río junto a la ciudad se han transformado en un pantano de petróleo y espuma. Varios equipos de bomberos comenzaron ayer a recoger el petróleo arrojado en las cercanías de Oktiabrsk, en la provincia de Samara, para tratar de impedir una catástrofe ecológica.

El incendio fue causado por una explosión en la sala de máquinas que causó la muerte de un marinero del petrolero. Además, al menos dos bomberos han tenido que ser hospitalizados después de recibir serias quemaduras durante su lucha contra las llamas. Los expertos opinan que no podrán apagar el incendio hasta que el crudo se queme totalmente. A bordo del Victoria todavía quedan unas dos mil toneladas de petróleo.