Sanidad limita a sólo 100 las muertes atribuibles en España a la reciente ola de calor

En cuanto el Ministerio de Sanidad ha solicitado datos a las comunidades autónomas sobre las muertes atribuidas al calor en julio y la primera quincena de agosto, se han duplicado las defunciones causadas por las altas temperaturas. La Generalitat valenciana negaba que hubiese ningún fallecido y ayer informó de tres defunciones por golpe de calor. Si hasta ayer sólo constaban 54 muertes, los datos recopilados por Sanidad refieren sólo 100, una cifra que contrasta con los significativos aumentos de mortalidad registrados por funerarias y registros civiles y con las 10.000 defunciones en Francia.

Las muertes debidas a la ola de calor de este verano "no tendrán nada que ver con las cifras que se están dando en Francia", afirmó ayer la directora general de Alta Inspección, Ana Sánchez. De momento, "los únicos datos seguros" son los 100 fallecidos que ha reconocido el Ministerio de Sanidad a partir de los datos suministrados por las comunidades autónomas, añadió.

De esta cifra, 46 son fallecimientos debidos al llamado golpe de calor (calor excesivo derivado de condiciones climáticas, según el criterio CIE 9 E900.0). Y las muertes atribuibles al empeoramiento de otras dolencias ascienden a 54. Eso sí, el Ministerio tiene "pendientes de confirmación" los datos relativos a ese agravamiento de enfermedades anteriores en nueve comunidades autónomas.

Las autoridades de Extremadura y Andalucía, al igual que la mayoría de comunidades, llevaban un cómputo de defunciones relacionadas con las altas temperaturas del que informaban a los medios de comunicación.

En otros casos, como el de la Comunidad Valenciana, hasta ayer su Consejería de Sanidad no sólo no informaba sino que negaba que hubiese ningún fallecido por estas causas pero en su informe al Ministerio han incluido tres por golpe de calor y no han proporcionado la cifra de defunciones por agravamiento de patologías.

Cifra "muy inferior"

En todo caso, el departamento que dirige Ana Pastor ha encargado un trabajo al Instituto de la Salud Carlos III, pero todavía no se sabe cuándo se dispondrá de datos sobre la incidencia de la inusual canícula en la mortalidad.

De todas formas, y según "las conversaciones" que los responsables de Sanidad han mantenido con "médicos, gerentes y responsables autonómicos" la cifra será "muy inferior" a las 10.000 que refieren las funerarias francesas (el Gobierno de París admite al menos 5.000), añadió Sánchez.

Para esta responsable de Sanidad, el motivo de esta elevada discrepancia es que "la población española tiene una cultura del calor que no tiene nada que ver con la francesa. Aquí hasta los analfabetos saben lo que tiene que hacer", comentó. "Además, en España llevamos años de consejos sobre qué hacer; se dan hasta en las escuelas", afirmó.

Por comunidades, Andalucía es la que más muertes ha reconocido (14). Asturias, La Rioja, Aragón, Canarias, Baleares, Ceuta y Melilla no han informado de ninguna defunción.

La cifra de las muertes por golpe de calor (una enfermedad codificada como tal y que se caracteriza por un mal funcionamiento del sistema de regulación de la temperatura corporal) no debe registrar grandes variaciones una vez que ha acabado la ola de elevadas temperaturas, opina el presidente de la Sociedad Española de Epidemiología, Ildefonso Hernández.

"Los estudios epidemiológicos indican que el efecto del calor se nota en tres días. Sobre lo que no hay datos concluyentes es acerca del efecto a más largo plazo del calor en otras dolencias", añade el experto.

Con estas cifras, Sanidad pretende cortar las especulaciones sobre el efecto de la ola de calor. "Éstos son los únicos datos con rigor", reiteró Sánchez. "Tenemos datos de otros años que indican que, por ejemplo, en 1995, cuando se produjo la última ola de calor que se cobró 93 muertes, la mortalidad fue inferior a la del año anterior".

Entre los factores de prudencia que hay que tener en cuenta a la hora de manejar los datos, Sánchez resalta que los cálculos publicados hasta la fecha "no tienen en cuenta la referencia de la variación poblacional". "Sin esta variable, la mortalidad no puede definirse ni extrapolarse".

Mientras se concluye el recuento, la situación de las posibles víctimas de la ola de calor varía de una comunidad a otra. por ejemplo en Navarra, el estado de salud de dos de las mujeres hospitalizadas en Navarra a consecuencia de golpes de calor sufridos las pasadas semanas se agravó ayer, informa Mikel Muez.

El empeoramiento de una vecina de Olite de 75 años de edad obligó a su ingreso en la unidad de cuidados intensivos del Hospital de Navarra. Asimismo, según la información médica facilitada ayer, empeoró el estado de una pamplonesa de 85 años ingresada en el mismo centro sanitario.