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Los dos primeros buques de EE UU llegan a las costas liberianas

EE UU crea un equipo de enlace entre los marines destacados en el país y las fuerzas de paz africanas

Dos buques de guerra estadounidenses con una dotación de unos 2.300 marines llegaron ayer a las costas de Liberia, mientras que un tercero se encuentra en camino. Además, Estados Unidos ha creado esta noche un equipo de enlace militar para Liberia haciendo todavía más plausible la intervención de Washington en este país.

El equipo de enlace militar, que incluye a entre seis y diez personas, deberá estableceer comunicaciones entre el cuerpo de Marines que se dirige hacia la costa de Liberia y la fuerza de paz de la Comunidad Económica del Africa Occidental (CEDEAO) que se está desplegando sobre el terreno.

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Sus oficiales de enlade se encargarán de preparar el desembarco de tropas estadounidenses si el presidente, George W. Bush, da la orden, según estas mismas fuentes. "Van a participar en la coordinación del apoyo logístico en función de las necesidades", según estas fuentes.

Washington ha anunciado que su misión será brindar apoyo logístico y de comunicaciones a las fuerzas de paz africanas que comenzaron a desplegarse en Monrovia el pasado lunes. Más de 200 soldados nigerianos ya se hallan apostados en el aeropuerto de la capital. La calma, pese a esporádicos disparos, se instaló en la ciudad, donde han muerto por lo menos 2.000 personas desde junio.

Las especulaciones sobre la salida de Charles Taylor del Gobierno liberiano parecen aumentar a medida que se acerca la fecha anunciada del próximo día 11. Un portavoz del Ejecutivo de Nigeria afirmó ayer que Taylor ha puesto "nuevas condiciones" para aceptar su exilio en ese país. "Según las últimas informaciones de que disponemos, parece que Taylor no aceptará nuestra oferta. Parece que ha puesto nuevas condiciones", señaló la fuente. Horas antes, el presidente surafricano, Tabo Mbeki, había confirmado la salida de Taylor. "Me ha llamado y dicho que cederá el Gobierno al vicepresidente", dijo Mbeki. Por su parte, un alto mando de los rebeldes advirtió de que aunque sus fuerzas se replieguen, no dejarán la capital hasta que Taylor se marche. "Mientras él esté aquí, yo no dejaré la isla Bushrod", dijo el comandante en referencia al distrito cercano al puerto.

Ante la perspectiva de que se mantenga el alto el fuego, las organizaciones humanitarias prosiguen su despliegue de ayuda para los cientos de miles de civiles que se hacinan en la capital. Dos embarcaciones partieron ayer de Sierra Leona y de Costa de Marfil cargadas con suministros humanitarios de la ONU.

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