"Queremos la libertad de todos los presos sin exclusiones"
Hisam Abd el Raziq, 50 años, es el ministro palestino para los prisioneros. Ostenta el cargo por decisión del presidente Yasir Arafat y del primer ministro Abu Mazen, pero además por derecho propio, no en vano ha pasado cerca de la mitad de su vida en las prisiones israelíes, donde cumplió hasta el último día una sentencia de 21 años que le fue impuesta por sus actividades al frente de una célula militar de Al Fatah. Tenía sólo 20 años cuando fue encarcelado. Recuperó su libertad en 1994.
Casado y padre de cinco hijos, el ministro conserva de su época de militancia cicatrices en todo el cuerpo, especialmente en las manos, como consecuencia de la explosión de un artefacto. Su despacho es estos días el centro de peregrinación permanente de familiares de reclusos, que acuden a reclamarle su intervención para conseguir de los israelíes su liberación.
Pregunta. ¿Cuál es la situación de los presos?
Respuesta. Hay 6.500 presos repartidos en 15 cárceles, tres de las cuales están en Cisjordania, controladas por el Ejército israelí. El resto de los detenidos están en prisiones en Israel. Más datos: 2.300 reclusos con sentencia firme, 78 mujeres, 230 niños menores de 16 años y 2.500 en fase de investigación y en espera de juicio. ¿Y en qué circunstancias? Están hacinados, sometidos a permanentes torturas en condiciones inhumanas.
P. ¿Tan importante es su libertad para los palestinos?
R. La liberación de los presos es uno de los principales problemas en el proceso político actual. Israel rechaza nuestras demandas de dejar libres a todos los prisioneros y establecer un calendario de liberaciones. Su propuesta es inaceptable; quiere utilizarlos como elemento de presión e intercambio en las negociaciones. Trata de liberarlos gradualmente según sus criterios, sin ningún acuerdo previo.
P. ¿Cuál es su estrategia frente a los israelíes?
R. Lo más importante es conseguir de los israelíes, en primer lugar, una declaración de principios general estableciendo la liberación de todos los palestinos encarcelados. Luego queremos negociar con ellos un calendario y un programa de liberaciones que afecte a todos los presos por igual. Este proceso de liberaciones duraría unos dos años y medio y concluiría con la declaración del Estado de Palestina en el año 2005. Pero sin distinciones, clases ni discriminaciones. Nuestro objetivo es la libertad de todos los presos palestinos.
P. Pues lo tienen difícil, el propio presidente Bush defiende las liberaciones selectivas de sólo aquellos que no tienen manchadas las manos de sangre.
R. Rechazamos las declaraciones que efectuó el presidente George W. Bush tras su entrevista con el primer ministro palestino, Abu Mazen, defendiendo los criterios selectivos de los israelíes. Hay miles de israelíes con las manos manchadas de sangre, por haber matado a palestinos, que están libres.
P. ¿Quién es el encargado de negociar con los israelíes?
R. Yo.
P. ¿Y qué tipo de negociación ha logrado establecer?
R. Ninguna. No hay negociación. Nada de nada: Israel no quiere negociar la liberación, sólo quiere imponer sus criterios.
P. ¿Intervendrá al menos en las negociaciones secretas en las que están implicados los egipcios, que ofrecen la libertad del espía israelí Azam Azam a cambio de 3.000 palestinos?
R. No sé nada de eso. La primera noticia.
P. ¿Y de la propuesta de trasladar los presos palestinos de Israel a Jordania?
R. Ni una palabra.
P. ¿Sabe algo de las negociaciones a través de la guerrilla islamista libanesa de Hezbolá?
R. Tampoco.
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