Las haciendas vascas y central se reúnen el martes para zanjar el conflicto del Cupo

Las administraciones vascas y central se reunirán el próximo día 15 en la Comisión Mixta del Concierto para intentar resolver un conflicto cuantificado en 32,2 millones de euros que el Gobierno vasco, unilateralmente, descontó de la liquidación del Cupo de 2001. La reunión, solicitada por ambas partes, se celebrará con un orden del día amplio no pactado, en el que los intereses de una y otra administración sólo coinciden en la cuestión de los 32,5 millones. Al deducirlos por su cuenta, por primera vez desde que se recuperó el Concierto en 1981, el Gobierno vasco ha convertido una controversia económica en conflicto político.

La resolución de este episodio, que para el Ministerio de Hacienda es la cuestión prioritaria de la reunión del martes, para la vicelehendakari Idoia Zenarruzabeitia es una más de las cuestiones que ha remitido al ministro. Aparte del desacuerdo sobre el Cupo ha incluido para tratar en la reunión el reintegro a las instituciones vascas de los gastos ocasionados por el hundimiento del Prestige, la financiación de la ampliación de la Ertzaintza que plantea el Departamento de Interior, la regulación de los flujos financieros en competencias que no requieren transferencia y la constitución de la Junta Arbitral, instrumento previsto en el Concierto.

Para Cristóbal Montoro el primer objetivo de la reunión debe ser "sentar las bases sobre cuál debe ser el comportamiento institucional" de las distintas administraciones representadas en la Comisión Mixta cuando se produzcan diferencias en la interpretación de un acuerdo, de manera que "no vuelva a producirse una situación como la actual", señala en su carta a la vicelehendakari. "Una vez sentadas estas bases podemos entrar a tratar todos los asuntos pendientes, bien en la reunión del día 15, bien en reuniones subsiguientes", añade. La reunión de la Comisión Mixta del Concierto se producirá después de un burocrático intercambio de cartas entre Madrid y Vitoria, que revela la falta de sintonía en las relaciones entre ambos gobiernos, y tras aceptar Zenarruzabeitia que el asunto se trate con la presencia de las Diputaciones forales.

La Secretaría de Estado de Hacienda envió el 6 de junio un requerimiento al Gobierno vasco para que pague los 32,2 millones que no ha abonado de la cifra de 341 millones correspondientes a la liquidadión del Cupo -cantidad a pagar por los servicios prestados y no traspasados por la Administración central- de 2001 y al primer cuatrimestre del de 2003. El Ejecutivo vasco alegó que deducía esta cifra a cuenta de la transferencia del Insalud, materializada en enero del año pasado al resto de las comunidades autónomas, en función de un mecanismo pactado en la Comisión Mixta de febrero, según la cual una "minoración de los Presupuestos Generales", provocaba una minoración también del Cupo. El secretario de Estado de Hacienda, Ricardo Martínez Rico, replicó que Euskadi asumió la Sanidad en 1987 por lo tanto esa reducción presupuestaria no le afecta.