_
_
_
_
_

Carod pide a los empresarios que no teman a su partido

El líder republicano asegura que ERC es la 'pyme' de la política

"ERC aspira a ser el partido de confianza del pequeño y mediano empresario". Con estas palabras, y consciente de los temores que despiertan en el sector empresarial las siglas del partido que dirige, el secretario general de ERC, Josep Lluís Carod Rovira, lanzó ayer un mensaje conciliador a una veintena de representantes del mundo empresarial, a quienes pidió "hacer país" para apoyar su proyecto político.

Tras configurarse como tercera fuerza política en los comicios municipales, ERC quiere vencer recelos y trata de ganarse la confianza de los empresarios. Las autonómicas dibujan un futuro en el que Esquerra ejercerá un papel relevante. Por ello, Carod se ha esmerado en los últimos días en apaciguar las reticencias que han mostrado tradicionalmente amplias capas empresariales hacia un partido de izquierdas e independentista. En las últimas semanas, el líder de ERC ha mantenido reuniones con representantes del Gremio de Constructores de Obras de Barcelona y Comarcas y de la Cámara de Comercio de Barcelona.

La cita de ayer fue con destacados representantes de la pequeña y mediana empresa (pyme) de Cataluña, a quienes Carod ya trató de ganarse la semana pasada al comprometerse a destinar el 20% de la obra pública a estas compañías. El líder republicano intentó despejar cualquier temor empresarial al identificarse con su audiencia. "ERC es la pyme [pequeña y mediana empresa] de la política", dijo Carod, que incluso defendió que la victoria de su partido en las urnas debe ser motivo de alegría para los empresarios presentes porque "alguien de los suyos alcanza el poder".

Cambio político

Sin embargo, no todo fueron buenas palabras. Carod emplazó a los empresarios a contribuir al cambio político que espera que se produzca en las elecciones de otoño mediante un relevo que debe darse también en "los sectores de la clase dirigente empresarial" para que entren nuevas generaciones "más valientes", que acaben con la "resignación rentista" que, dijo, dificulta el buen desarrollo de la economía catalana.

"Son otros, y no nosotros, los que deciden", esgrimió Carod en un discurso plagado de referencias a los "límites" y "obstáculos" que supone depender de una "dinámica imperial centralista".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

El secretario general de ERC defendió en este sentido la gestión autonómica de la política de inmigración y la fiscal,al tiempo que se comprometió a suplir el déficit de infraestructuras en Cataluña y mejorar las comunicaciones con el resto de regiones del arco mediterráneo para potenciar este espacio económico. Carod defendió también una distribución territorial de las inversiones industriales -tras el impacto que han sufrido la Segarra y el Lluçanès después del cierre de Lear y Puigneró- y aseguró que triplicaría el presupuesto que se destina a I+D para las empresas.

El líder republicano presentó esta batería de propuestas en un almuerzo al que asistieron, entre otros, el secretario general de la Confederación de Comercio, Miquel Àngel Fraile; el presidente del Agrupament de Botiguers i Comerciants, Esteve Canteria; el secretario general de CECOT, David Garrofé, y el vicepresidente de Pimec-Sefes, Josep Lluís Francesc.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_