La agencia catalana aún no ha acreditado ni un solo profesor contratado de universidad

La Agencia para la Calidad del Sistema Universitario (AQU) todavía no ha resuelto ni una de las 1.738 peticiones de acreditación de los docentes que aspiran a ser contratados por las universidades catalanas. Por el contrario, la Aneca, su homóloga estatal, ya ha acreditado a más de 250 profesores de los 642 que pretenden trabajar en centros catalanes. El Tribunal Constitucional suspendió cautelarmente el precepto legal que establecía la exclusividad de la AQU para acreditar en Cataluña. Las universidades han optado por aceptar acreditaciones de las dos agencias.

La Ley de Universidades de Cataluña (LUC) creaba un cuerpo docente contratado cuya acreditación correspondía exclusivamente a la AQU. El Gobierno del PP recurrió contra este artículo y otros cuatro más de la ley ante el Tribunal Constitucional, que le dio la razón. La agencia catalana todavía no ha emitido ni una sola acreditación, aunque las universidades se muestran dispuestas a aceptar los informes de ambos organismos para agilizar su trabajo.

La Universidad Pompeu Fabra sólo tiene pendientes dos acreditaciones de profesorado, pero la Politécnica tiene 80 solicitudes y califica la situación de "sufrimiento", en expresión de Vera Sacristán, vicerrectora de personal, que reconoce que para preparar el próximo curso van "muy mal de tiempo". Sacristán lamenta que aún no haya ningún docente con la acreditación. "Si se hacen cambios legislativos, debería existir un mecanismo de transición entre un sistema y otro" para evitar problemas, opina.

Fuentes de la agencia catalana responden que desde que ésta inició su andadura, el pasado marzo, se ha intentado agilizar al máximo las gestiones para las acreditaciones y prometen que los primeros 200 informes saldrán a la luz dentro de 15 días. José Manuel Torras, miembro de la agencia, reconoce que "probablemente esta situación es un inconveniente para las universidades", aunque subraya que "legalmente están dentro del plazo anterior a los tres meses de silencio administrativo". La AQU, reconoce, "está muy atareada" para que los informes estén listos a tiempo.

El Ejecutivo de CiU, que votó a favor de la Ley Orgánica de Universidades (LOU) con el argumento de que le otorgaba autonomía a su agencia, ha sido traicionado por el Gobierno del PP, que el pasado junio llevó al Tribunal Constitucional cinco artículos de la ley universitaria catalana, entre ellos el que establece que la institución catalana no está obligada a reconocer las acreditaciones que realicen sus homólogas españolas, como la Aneca. "La LOU reconoce que las agencias autonómicas pueden acreditar a los profesores, pero también establece que lo pueda hacer una agencia de carácter nacional", explicó en junio un portavoz del ministerio, quien a firmó: "La LUC sólo reconoce a los profesores acreditados por la AQU, y ahí está el conflicto".