El número de vehículos crece en Cataluña el 21% en cinco años

A los catalanes les gusta cada vez más disponer de transporte privado. El parque motorizado ha aumentado el 21,5% en los últimos cinco años, según se desprende del Anuario Estadístico de Accidentes, presentado ayer. El año 2002 se cerró con 4,5 millones de vehículos y 6,3 millones de personas, lo cual supone una media de 7 por cada 10 habitantes. En Girona hay casi un vehículo por persona.

En 1998 había en Cataluña 3,7 millones de vehículos censados, informa la Generalitat. El año pasado la cifra había aumentado en 800.000 -el 21,5%- hasta alcanzar 4,5 millones, según el Instituto de Estadística de Cataluña (Idescat), de los que el 72% pertenece a la provincia de Barcelona. Estos datos figuran en el Anuario Estadístico de Accidentes en Cataluña, que presentó ayer la consejera de Justicia e Interior, Núria de Gispert.

Mientras que el crecimiento del parque de vehículos ha sido imparable, la población de Cataluña ha aumentado a un ritmo mucho más lento. Desde 1998, ésta ha crecido tan sólo en 200.000 personas, una cuarta parte del incremento experimentado por el parque motorizado, lo cual, en opinión de los expertos, amenaza con originar graves colapsos en el sistema viario.

La mayor parte de los vehículos que poseen los catalanes son turismos, aunque la presencia de la motocicleta está creciendo a un ritmo vertiginoso puesto que suman ya 425.115, de acuerdo con las estadísticas dadas a conocer ayer por la Generalitat. Aun así, las motos y los ciclomotores tan sólo suponen el 9% y el 7%, respectivamente, del parque motorizado, si bien continúan concentrando un altísimo nivel de accidentes que se traduce año tras año en una alarmante pérdida de vidas humanas.

Los turismos representan el 66% del conjunto de vehículos, mientras que el 15% son camiones y furgonetas. Los coches son los que se ven involucrados con más frecuencia en siniestros con víctimas. La mayor parte de víctimas mortales que se producen en las carreteras catalanas tienen entre 18 y 34 años. Los varones siguen siendo aplastante mayoría entre los conductores catalanes: el 61% frente al 39% de mujeres, agrega el informe.

Girona se lleva la palma en cuanto a número de vehículos, con 900 por cada 1.000 habitantes, mientras que Barcelona roza los 700 y Tarragona y Lleida superan ligeramente esa cifra. Girona también toma la cabeza en cuanto al número de conductoras, que suponen el 42,4% del total de personas al volante, y superan en varios puntos la cifra de las restantes provincias.

En el extremo opuesto de Girona se sitúa Lleida, donde las mujeres conductoras representan únicamente el 36,4%.

Lo más llamativo de las cifras dadas a conocer ayer es que el parque de vehículos está creciendo a un ritmo aproximado de 200.000 más cada año durante la última fase de bonanza económica que se inició en 1995. Frente al incremento del parque en un 21,5%, la población apenas ha aumentado el 3,4%. De mantenerse este ritmo de crecimiento del número de vehículos, en una década éstos igualarían a la población.

Menos accidentes

La consejera de Justicia e Interior se mostró ayer optimista respecto a que se logre acabar el próximo ejercicio de 2004 con una reducción del 15% del número de víctimas mortales y de heridos graves en las carreteras catalanas. La reducción de los accidentes es el principal objetivo que se han marcado los responsables del Plan Catalán de Seguridad Viaria entre los años 2002 y 2004.

Pese a que hasta el 31 de mayo las cifras de siniestros apuntan un descenso, los datos continúan siendo demoledores. Durante el año 2002 se registraron en las carreteras y autopistas catalanas 21.465 accidentes de tráfico en los que resultaron muertas 708 personas y 29.891 heridas, de acuerdo con los datos contenidos en el informe dado a conocer ayer por De Gispert.

Las campañas para prevenir los accidentes están teniendo peso en los conductores. Pero se mantienen los despistes, la velocidad excesiva y el alcohol como las principales causas de las colisiones, a tenor de los datos de los que informó ayer la Generalitat.

Pese a que los responsables del tráfico advierten un avance en el uso del cinturón de seguridad y del casco en los motoristas, lo cierto es que el 40% de las víctimas no lo llevaba en el momento del impacto, hecho que da una idea de por qué las autoridades de tráfico consideran que se está todavía ante un problema de la máxima gravedad en el que de momento no debe quedar lugar para la autocomplacencia.

Reducir la velocidad

Las autoridades de tráfico hacen un llamamiento a la reducción de la velocidad, que supone uno de los principales motivos de los accidentes, sobre todo de los mortales. El exceso de velocidad es una de las causas directas del 20% de los aproximadamente 20.000 accidentes con víctimas que se producen cada año en Cataluña.