85.000 civiles huyen de sus casas por el conflicto en Congo

Más de 85.000 personas han abandonado la ciudad congoleña de Bunia, al noreste del país, por el conflicto tribal que enfrenta a los lema y los lendu, señaló ayer Unicef. De ellos, unos 25.000 civiles han huido rumbo a Uganda. Sólo durante esta semana, ACNUR ha registrado el asentamiento de 10.000 congoleños en la orilla ugandesa del lago Albert. En Bunia, Unicef ha detectado decenas de casos de desnutrición de menores que han perdido a sus padres.

Aunque los combates en Bunia, en la región de Ituri, han disminuido su intensidad, la población ha abandonado la zona en un desplazamiento masivo. La mayoría de los civiles, unos 60.000, han huido siguiendo el cauce del río Ituri en dirección a la ciudad de Mambasa, a 150 kilómetros de Bunia, afirmó ayer Unicef. Otros 25.000 han recorrido los 40 kilómetros hacia el sur que los separan de la frontera con Uganda; de ellos, cerca de 10.000 ya se encuentran en territorio ugandés, según el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), con lo que la cifra de refugiados y desplazados asciende a 85.000.

En la ciudad de Bunia, epicentro de los enfrentamientos tribales entre hemas y lendus, Unicef ha detectado más de medio centenar de casos de desnutrición, la mayoría que han perdido a sus padres. La organización ha distribuido suplementos de proteínas para cubrir las necesidades alimentarias básicas.

Por otra parte, la Misión de Naciones Unidas en la República Democrática de Congo (Monuc) localizó ayer a 30 nuevos cadáveres, con evidencia de mutilaciones, en las afueras de Bunia. El estado de los cuerpos alimenta las denuncias de canibalismo ritual que ha recogido la ONU en los últimos días. Con estos hallazgos, la cifra de víctimas asciende a unos 350 desde el 7 de mayo, número provisional debido a que hay barrios en los que los equipos de la Monuc no han entrado por el alto grado de inseguridad derivado de los tiroteos esporádicos. Organizaciones como Human Rights Watch y Amnestía Internacional han pedido a la ONU el envío de tropas para proteger a los civiles.