La Real coge turno

Por los pelos, pero Nihat puso en lo más alto a la Real Sociedad, que ve un horizonte celestial a falta de sólo cuatro jornadas. Tras su sufrida victoria ante el Recreativo (1-0), ahora la Real sólo depende de la Real. Claro que lo mismo decían en A Coruña antes de la noche del sábado, antes de que el Valencia de nuevo incendiera Riazor. Esta vez con Djukic de valencianista y Fabio Aurelio de González.

Llegada la hora de la verdad, la Real se muestra tan firme como en los inicios de la temporada, cuando parecía un proyecto ilusionante condenado a desinflarse en el momento de la verdad. No ha sido así y el equipo de Denoueix ha llegado tan pletórico como el que más al borde de la cima.

Al pie de la Real se situó de nuevo el Madrid, que se repuso de su amargura europea con una sencilla goleada al Málaga (5-1), con Morientes de nuevo como goleador y Raúl enchufado otra vez. Un bálsamo para Del Bosque y todo el grupo, a los que sólo queda apurar su tránsito en la Liga para remediar el curso. Con una nómina tan astral al Madrid sólo le vale levantar un título. Esa es la política de grandeza que en estos tiempos de bonanza propaga la institución. Ayer, el juicio de Chamartín no fue severo. No hubo gran bronca y los goles aliviaron muy pronto cualquier sentencia en contra del equipo o en otra dirección.

Estrujada la cabeza de la Liga, las otras zonas calientes de la clasificación aún están sin resolver. En el pozo respiró Osasuna, que ganó al Betis, pero a tiro de un partido quedan el Recre y el Alavés, del que no tuvo piedad su vecino de San Mamás, que le goleó en Mendizorroza (2-4). El punto rascado por el Rayo en el Sánchez Pizjuán (3-3) apenas le saca de apuros a estas alturas de la temporada.

La aventura del UEFA también es laberíntica. Athletic, Barça, Mallorca, Atlético, Betis y Sevilla se discutirán un puesto. El otro parece fijado para el Celta, algo descolgado en su pelea con el Valencia por la última plaza de Liga de Campeones después de ser zarandeado de lo lindo en Villarreal (5-0), donde jugó con sólo nueve jugadores la mayor parte del choque. Serán precisamente los vigueses quienes junto al Atlético, el Valencia, el Athletic, el Málaga y el Espanyol inclinen el título de un lado u otro. Todos estos equipos se medirán a los aspirantes al trono en las cuatro jornadas que restan para proclamar al campeón. De momento, la Real ha cogido turno y saca un cuerpo a sus perseguidores.