El Athletic estruja al Alavés
La expulsión de Magno decanta un partido de defensas en apuros
Estadísticamente, el Alavés ha ganado al Athletic uno de cada 20 partidos, y ayer no tocaba. Lo tuvo al alcance en un partido del que ninguno de los dos equipos tiene motivos para salir contento. Sus defensas dan miedo. Se marcaron seis goles, pero pudieron ser otros tantos más. Al Alavés le entró la tiritona clásica de los equipos en fase de demolición, aunque hace semanas que parecía haberla superado. El Athletic, con una alineación experimental, se encontró con la UEFA más cerca gracias a Magno, un jugador propenso a complicarse la vida en cuanto el árbitro apunta su nombre en una tarjeta. Ayer se autoexcluyó a media hora del final y el Athletic no tuvo piedad del vecino. Lo estrujó un poco más.
ALAVÉS 2 - ATHLETIC 4
Alavés: Dutruel; Karmona (Geli, m. 70), Abelardo, Téllez, Llorens; Helguera, Astudillo; Magno, Pablo, Iván Alonso; y Rubén Navarro (Ibon Begoña, m. 70).
Athletic: Aranzubia; Javi González (Tiko, m. 69), Luis Prieto, Aitor Ocio, Karanka, Del Horno; Alkiza, Etxeberria, Yeste (Óscar Vales, m. 84), Ezquerro (Arriaga, m. 88); y Urzaiz.
Goles: 0-1. M. 19. Yeste, con un zurdazo colocado. 1-1. M. 26. Magno, tras regatear a Aranzubia. 2-1. M. 29. Fuerte remate de Astudillo. 2-2. M. 56. Urzaiz, de cabeza. 2-3. M. 75. Etxeberria, con un tiro ajustado al palo. 2-4. M. 87. Etxeberria, a pase de Tiko.
Árbitro: Téllez. Amonestó a Etxeberria, Karanka, Aranzubia, Alkiza, Turiel, Helguera y, en dos ocasiones, a Magno (m.61).
16.577 espectadores en Mendizorroza.
En Mendizorroza, sólo se había visto un gol de cualquier equipo en los últimos dos meses. Y, después de ver el choque de ayer, parece mentira. Más que un partido de fútbol, hubo una competición de defensas en apuros. Después de una salida arrolladora del Alavés, el duelo se convirtió en un partido de tenis. Pronto se dieron cuenta los dos equipos de que en cuanto enviaban el balón al área contraria, se paseaba como Pedro por su casa. Así que, ¿para qué jugar la pelota?
Los primeros en quedar en evidencia fueron los alavesistas. Yeste, el más inquieto del Athletic, se coló entre Abelardo y Téllez, y marcó lo que unos minutos antes no supo Urzaiz. Con el 0-1, el Alavés se desplomó. Por un momento, pareció que el equipo de Heynckes se pasearía por Mendizorroza. Pero no. El Alavés encontró su propio chollo: Karanka. Lento, con salidas a destiempo y desbordado siempre por Rubén Navarro, abrió un boquete en su zona. Y además nadie le cubría las espaldas.
Heynckes probó un experimento de dudosa eficacia. Dio entrada a un defensa, Luis Prieto, para perseguir por todo el campo a Pablo, que lo mareó yendo de un lado para otro. El problema se le presentó al Athletic a espaldas de Prieto. En la derecha, Javi González se perdió viendo cómo le llegaban a su compañero de baile, Iván Alonso, balones aéreos que el rojiblanco sólo podía seguir con la vista. En el centro, la velocidad mató al Athletic. Primero, Magno marcó en un pase de Rubén Navarro. Después, Astudillo anotó el 2-1 al aprovecharse de un rechace en el único balón que al llegó Javi González de cabeza. Rubén Navarro pudo marcar el tercero en otra jugada con Magno.
El Alavés no sentenció, y Aranguren quiso aguantar en el banquillo a Ilie, de largo el mejor alavesista, a la espera de ver lo que ocurría. Y ocurrió que el Alavés se desplomó de nuevo. Dejó pasearse a Ezquerro a su antojo por el área, y sirvió el empate a Urzaiz. Y Magno cometió la falta más estúpida del partido, que le valió la expulsión. Para cuando Ilie salió al campo, Etxeberria ya había sacado los colores a la defensa vitoriana.
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