China suspende la entrega de niños en adopción a causa de la neumonía
España es el segundo país del mundo, tras Estados Unidos, que más menores chinos adopta
El Gobierno chino ha suspendido sin fecha la entrega de niños en adopción a causa de la epidemia de neumonía atípica que ha infectado a 5.191 personas y ha provocado la muerte a 275 en todo el país. La medida entró en vigor el pasado jueves. Aquellos padres extranjeros que ya tengan en su poder la carta oficial de invitación que les capacita para recoger al bebé podrán hacerlo, aunque el Centro Chino de Adopciones ha aconsejado que retrasen el viaje. Casi 1.300 familias españolas (un tercio del total de las adopciones internacionales en España) acudieron el año pasado a buscar a sus hijos al país asiático.
Las autoridades chinas aseguran que han tomado esa decisión "para evitar las infecciones cruzadas que podrían ser causadas por la afluencia de gente y para garantizar la salud y la seguridad de todas las partes implicadas en la adopción". La medida no afecta a los residentes extranjeros en China. Para aplicar la nueva normativa, las autoridades han paralizado el envío de dos documentos claves. Por un lado, la carta de asignación, en la cual los padres reciben también la foto de su futura hija (prácticamente todas las criaturas adoptadas son niñas), que en caso de acuerdo devuelven firmada, y por otro, la posterior carta de invitación, que les permite ir a China para recibir el bebé.
El Centro Chino de Adopciones insiste a los padres que ya tengan la invitación (cuya validez ha sido prolongada de tres meses a seis) para que hagan todo lo posible por diferir el viaje, y advierte que, de no ser posible, deben contactar con antelación con la oficina local de registro. "Es importante enterarse de si el registro donde hay que inscribir al bebé y la notaría asignada en la provincia que debe emitir la documentación están funcionando", recomiendan fuentes del consulado de España en Pekín.
La medida sobre adopciones se enmarca en una serie continua de restricciones decretadas para evitar la propagación de la epidemia. Desde que a finales de abril salió a la luz la neumonía atípica, muchos ciudadanos han dejado de acudir con regularidad a sus trabajos. Además, hay estrictos controles a los viajeros que se desplazan entre provincias, sobre todo aquellos que proceden de las regiones más afectadas como Pekín o Guangdong.
China ha tomado disposiciones drásticas para impedir que los residentes de una zona viajen a otra, en un intento de evitar que la enfermedad llegue a las zonas rurales. Precisamente, muchas de las niñas adoptadas son originarias de Guangdong, provincia de 78 millones de habitantes, que ha registrado 1.515 casos.
La decisión del Centro Chino ce Adopciones no supone, sin embargo, la paralización total del proceso, ya que el organismo continuará recibiendo las nuevas peticiones "como de costumbre". España es el segundo país por número de adopciones en China, detrás de Estados Unidos. La cifra se ha multiplicado por 12 en cinco años; de 105 en 1997 pasó a 1.296 el año pasado. Entre enero y marzo de 2003, los españoles han acogido a 600 niñas chinas. Estados Unidos llegó a 6.100 en 2002.
La demanda se ha disparado en los últimos años porque la Administración china ha ganado fama de seria y transparente. Gracias a las entregas, el Gobierno ha solucionado en parte el problema de los miles de niñas que son abandonadas cada año. Al mismo tiempo el país ingresa un dinero apreciable. El proceso de adopción, que dura en total casi dos años, supone para las parejas un desembolso, incluidos la estancia y el viaje, de unos 12.000 euros, de los que 2.800 son un donativo para el orfanato y 1.900 corresponden a diversos papeleos en la provincia.
China registró ayer 39 infectados y 4 fallecidos por la neumonía atípica, de los cuales 28 y 1, respectivamente, se produjeron en Pekín. Pese a que se trata del sexto día consecutivo que las autoridades municipales de la capital anuncian menos de 50 casos, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió ayer de que no se puede decir por ello que la epidemia esté disminuyendo. La OMS teme que haya pacientes que muestran síntomas que no están siendo incluidos en el cómputo. "Encajan en la definición del caso, pero, como mejoran en unos pocos días, no son vistos como casos probables", dijo ayer Daniel Chin, líder del equipo que dirige la investigación en la capital. Según Chin, también se está excluyendo a pacientes porque no han tenido contacto conocido con algún infectado, una definición que se utiliza en áreas con pocos contagios, pero que no se puede emplear en Pekín. Además, Chin cree que hay enfermos con síntomas ligeros que están siendo enviados a casa demasiado pronto: "Quizá no necesitan ser hospitalizados, pero podrían ser aún contagiosos".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.