'Núcleo' de vanguardia para los más fuertes
La estrategia combinada de Alemania y Francia en la Convención fue ayer tan obvia como la táctica británica para frenarles. Un frente muy activo fue el de la pretensión franco-alemana de que un grupo de países pueda ir mucho más lejos en política exterior y de defensa, en la que sólo participarán los más fuertes, los que "cumplan criterios elevados de capacidades militares". ¿Encaja España, que apoya la iniciativa, cuando gasta menos del 1,5% del PIB en defensa?
Cooperación estructurada. Así denomina el proyecto constitucional al sistema para crear esa avanzadilla de países. Suscribirán una cláusula de defensa mutua (superior a la de asistencia mutua) similar al artículo 5º de la OTAN y acometerán "compromisos más vinculantes" (Londres suprime ambas opciones).
Agencia de armamento. Todos la apoyan. El proyecto la denomina Organismo de Armamento y de Investigación Estratégica.
Política exterior. París y Berlín desean que las decisiones en exteriores y seguridad se tomen por mayoría cualificada, salvo cuando actúen los ejércitos. Francia y el PSOE agregan que los objetivos estratégicos de la UE se decidan por mayoría cualificada, algo que horripila a los británicos. El socialista Diego López Garrido sugiere en algún caso la fórmula de "la mayoría supercualificada" para acercar a Francia y Reino Unido. El texto constitucional plantea que el ministro de Exteriores represente a la UE en organismos internacionales ("si ha lugar", precisa Londres), y que incluso pueda intervenir en el Consejo de Seguridad (Londres no lo admite). En esos organismos, los europeos "defenderán las posiciones e intereses de la Unión", dice el texto. Alemania (Joschka Fischer aspira al cargo) quiere un servicio diplomático exterior y que las delegaciones de la Comisión en el extranjero representen a la UE ("según las circunstancias", enmienda Londres).
Un comisario por país. El proyecto constitucional señala que la Comisión tendrá un presidente, 14 comisarios y "comisarios delegados". La protesta de los candidatos y de los países pequeños forzó ayer un arreglo: a cambio de que esos países acepten un presidente estable (dos años y medio prorrogables), cada país tendrá un comisario "en los próximos años".