Aznar descarta a Arafat como interlocutor para el proceso de paz

El presidente palestino, Yasir Arafat, "tiene su papel y autoridad", pero "es muy claro que el interlocutor [para el proceso de paz] es el primer ministro, Abu Mazen". El presidente del Gobierno español, José María Aznar, relegó ayer con estas palabras al líder histórico de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) a un segundo plano, tal y como EE UU e Israel han venido promoviendo durante meses.

Aznar se entrevistó el miércoles con el presidente George W. Bush y defendió ayer la aplicación inmediata de la Hoja de Ruta ante el Comité Judío Americano. El presidente del Gobierno, que aspira a lograr para Madrid la sede de la nueva conferencia de paz que debería celebrarse antes de que concluya el año, según el plan de acción elaborado por el Cuarteto que forman EE UU, la UE, la ONU y Rusia, recurrió a la autoridad del líder estadounidense cuando se dirigió al comité que integra a casi todas las organizaciones hebreas norteamericanas.

"Ayer hablé con el presidente Bush sobre Oriente Medio, y me pidió que les transmitiera dos principios que compartimos plenamente", dijo. "El primero es que cualquier política e iniciativa debe basarse en la garantía de la seguridad del Estado de Israel. El segundo es que en este momento todo el mundo debe asumir sus responsabilidades específicas".

Como uno de los líderes homenajeados en la cena anual del comité, junto a los primeros ministros de Australia, El Salvador y Letonia, Aznar prosiguió su discurso ante una audiencia de más de mil personas para asegurar que Europa y EE UU cooperarán a fin de lograr el objetivo ya señalado por Bush de "dos Estados independientes, Israel y Palestina, conviviendo en paz y seguridad". A continuación afirmó que "la aplicación de la denominada Hoja de Ruta no podía esperar más tiempo".

Ese plan, recordó, parte de que "lo primero debe ser el final de todo acto de terror", porque "la seguridad de Israel no es negociable". Pero el plan parte también de la convicción de que un Estado palestino democrático "es la mejor garantía para la seguridad de Israel". "El pueblo palestino ahora tiene derecho finalmente a ver su territorio libre de la ocupación", dijo.

Tras recordar que la desaparición de Sadam Husein crea "un mundo más seguro" y la posibilidad de "avanzar para lograr la paz", Aznar adoptó tonos bíblicos para advertir a algunos de los miembros más influyentes de la comunidad hebrea de este modo: "Ustedes, que ciertamente detentan la legitimación más antigua, y quizá la mejor, de ser la sal de la tierra no ignoran tampoco que la virtud de la sal es sazonar y vivificar hacia el futuro. Por desgracia, quienes sólo contemplan el pasado corren el riesgo de convertirse, como ya sucedió una vez, en estatuas de sal".

En la misma rueda de prensa en que descartó a Arafat como interlocutor, previa a este encuentro con el comité, el presidente del Gobierno se refirió al comportamiento del Gobierno de Israel, del que la semana pasada dijo que esperaba algún gesto positivo, como la devolución de la libertad de movimientos al líder palestino.

"Creo que Israel tiene que dar pasos, pero todavía no los ha dado", dijo Aznar ayer. "Pero creo que los va a dar. En los próximos días vendrá el primer ministro, Ariel Sharon, a Washington. Es muy importante garantizar la estabilidad y la seguridad para que los primeros pasos de la Hoja de Ruta salgan bien, porque va a haber mucha gente dispuesta a boicotear el proceso".