Un buque de guerra de EE UU averiado permanece seis días en Gibraltar

Los habitantes del Campo de Gibraltar vuelven a vivir estos días el recuerdo de la estancia del submarino nuclear británico Tireless en el puerto del Peñón, donde permaneció averiado un año. La base naval de Gibraltar acoge ahora un barco de guerra estadounidense con una avería en sus sistemas de propulsión.

El buque es el destructor americano Sir Winston Churchill, que recaló el pasado domingo en aguas de la bahía de Algeciras para ser reparado en los astilleros de Cammel Laird, en las proximidades del muelle de South Mole, donde se encuentra desde entonces.

Fuentes del Gobierno de Gibraltar mostraron ayer su oposición a que el barco, que participó activamente en la guerra contra Irak, sea reparado en el Peñón, ya que el arsenal que supuestamente transporta a bordo supone un riesgo evidente para la zona, que no cuenta con unas instalaciones preparadas para albergar el mencionado material bélico.

Fuentes próximas a la base naval gibraltareña no descartaron que el destructor, que podría abandonar estas aguas en las próximas horas, sea remolcado hasta la base naval de Rota (Cádiz), tras el arreglo de algunos dispositivos del sistema de propulsión del barco, que le impiden realizar con normalidad maniobras de navegación.

La falta de información llevó a los ecologistas de Agadén a protestar por la presencia del destructor. "No queremos vivir la experiencia de un segundo Tireless y por eso instamos al Gobierno a que exija al Reino Unido la inmediata salida de este buque de guerra del puerto de Gibraltar", afirmó el portavoz de Agadén, Martín Caballero.