La subasta de obras de Breton supera previsiones y llega a los 26 millones

La subasta de obras de arte moderno pertenecientes al legado de André Breton, iniciada el pasado lunes en París, ha superado todas las previsiones, alcanzando los 26 millones de euros en ventas. La mayor parte de las obras han sido adjudicadas a precios superiores a los previstos, duplicando, triplicando e incluso multiplicando por 50 el precio de salida. El Ministerio de Cultura español ha adquirido por un total de 103.000 euros dos óleos: Paysage (1947), de Luis Fernández, y un cuadro sin título de 1950, hasta ahora desconocido, de Antonio Saura.

La subasta de 5.500 objetos del legado Breton iniciada la semana pasada con la venta de los manuscritos y libros de la biblioteca del padre del surrealismo ya recaudó el primer día un 40% más de lo previsto. A la subasta de obras de arte (400 pinturas y dibujos), que empezó el pasado lunes, le seguirá la de fotografías (1.500) y diversas piezas de arte primitivo. La venta de la colección completa puede superar los 30 millones de euros, según la estimación hecha por la empresa subastadora.

Expectación y polémica se han mezclado en esta subasta a la que se ha opuesto de forma ruidosa el autodenominado Comité Breton, y más de 2.500 personalidades ante la dispersión que ello supone del legado. Gritos de "no compren nada" o "róbenlo todo" precedieron el inicio de la venta de las obras de arte modernas, un conjunto de pinturas que, a pesar de haber mucho cuadro menor, incluía algunas obras maestras codiciadas tanto por museos como por compradores privados. El empresario informático Bill Gates, los cantantes Madonna y Elton John, y el actor Tom Hanks han aparecido en la lista de interesados en la subasta.

El Estado francés ha ejercido el derecho preferente de adquisición comprando 17 obras de arte, que en su mayor parte están destinadas a incrementar los fondos del Centro Pompidou. Entre ellas figura el enorme relieve de madera de Jean Arp titulado Femme, cuya venta por 2,5 millones de euros supuso un récord. También para el Pompidou es Le Piège, una rara y extraña obra de Miró de 1924, uno de los primeros cuadros de su lenguaje surrealista, que alcanzó los 2,5 millones, cifra curiosamente por debajo del precio estimado, entre tres y cinco millones.

Entre las obras de autores españoles subastadas, el Ministerio de Cultura español adquirió el pasado martes, por 65.000 euros, el óleo sobre tabla Paysage (1947), de Luis Fernández, y un óleo sobre lienzo de 1950 sin título de Antonio Saura característico de su producción en la década de los cincuenta, entre surrealista y ya abstracta, que fue comprado por 38.000 euros. Espantapájaros, de 1930, de Maruja Mallo, una obra maestra dentro de las vanguardias españolas, fue adquirida por un coleccionista británico por 260.000 euros, el triple de lo estimado. Y una tela de Óscar Domínguez, de gran calidad y rareza, fue adjudicada por 320.000 euros.

La Fundación Dalí de Figueres (Girona) hizo pública ayer la adquisición en la subasta de un conjunto de manuscritos, cartas de Dalí y otros artistas, fotografías en las que aparece el pintor surrealista y catálogos de exposiciones de gran valor documental.