Alumnos de FP podrán convalidar asignaturas por otras universitarias

Los alumnos que cursen ciclos formativos de grado superior de Formación Profesional (FP) el próximo curso y que tengan la intención de estudiar después una carrera técnica universitaria podrán convalidar algunas de las materias que resulten comunes. Éste es el objetivo del Departamento de Educación, que ha creado un grupo de trabajo formado por profesores de Formación Profesional y de la universidad para analizar la mejor forma de conectar estos ciclos con las carreras técnicas y hacerlos de esta forma más atractivos para los estudiantes.

En principio, la medida no afectará a todos los ciclos. Según explica el viceconsejero resposnable de la FP, Jorge Arévalo, el curso que viene se abarcarán cinco o seis de ellos y, si se obtienen buenos resultados, la experiencia se podría generalizar posteriormente. "A los estudiantes que culminen un ciclo se le concederán una serie de créditos y así no tendrán que hacer la carrera completa, porque en ocasiones las materias se repiten", expone.

En el fondo, lo que subyace en la propuesta es el interés del departamento que encabeza Anjeles Iztutea por que los estudiantes cursen este tipo de formación, dada la contrastada falta de especialistas para cubrir determinados puestos laborales (más de 18.000, según los cálculos que ha realizado la patronal vasca Confebask).

En la actualidad, para realizar un ciclo superior de FP previamente hay que superar el Bachillerato. Y a partir del curso 2004-2005, los alumnos deberán además aprobar la reválida impuesta por el Ministerio de Educación. Si no lo logran, dispondrán de una prueba alternativa. Arévalo no es partidario de la reválida, pero sí defiende que los alumnos de Formación Profesional superior obtengan con anterioridad el título de bachillerato.

El Ministerio de Educación sostiene que los alumnos de los ciclos superiores tienen que pasar la reválida u otra prueba porque sus estudios son parecidos a los de una diplomatura universitaria, que comprende tres años de duración. Se trata de erradicar la imagen de que la FP no ofrece una formación de calidad.

"La universidad", señala Arévalo, "tiene su tirón, pero hay que pensar muy bien lo que se va a estudiar. Si haces una carrera con futuro profesional incierto, es mucho mejor estudiar primero un ciclo formativo superior que tenga inserción y a partir de ahí estudiar una carrera. Porque terminar la carrera, no tener trabajo y ponerse a cursar un ciclo de Formación Profesional es un palo tremendo para la persona, tanto a nivel moral como económico".

Actualizar conocimientos

Por eso, el responsable del Gobierno vasco aconseja a los estudiantes que se decidan en primera instancia por el Bachillerato y que antes de recalar en la universidad hagan un ciclo superior de FP.

Al final, son más años de estudio, pero a la larga se trata de una "inversión" y una garantía de "lograr un empleo". Es lo que ocurre en países como Francia y Alemania, en los que los estudios de Formación Profesional cuentan con una gran tradición. Más del 70% de los estudiantes pasan por el Bachillerato y la FP antes de acudir a la universidad.

Según un estudio que ha realizado el Departamento de Educación, el 91% de los titulados de FP encuentra trabajo a los seis meses de finalizar sus estudios, mientras que tres de cada cuatro desempeñan labores relacionadas con su disciplina. En la actualidad, alrededor de 19.000 jóvenes estudian en la comunidad autónoma vasca alguno de los ciclos superiores de FP y otros 11.000 están matriculados en una especialidad de nivel medio.

Una de las quejas más frecuentes entre los alumnos es que durante su paso por la Formación Profesional superior se pierden algunos conocimientos de las materias más técnicas en relación a lo que habían aprendido en el Bachillerato y que después les serán exigidos cuando cursen una carrera universitaria. El viceconsejero de Formación Profesional es consciente de esta problemática y apunta que el departamento está ensayando diversas fórmulas para paliar la situación.

"Se trata de conocer el número de alumnos que tras concluir el ciclo tienen intención de ir a la universidad y actualizar sus conocimientos para que no tengan problemas. El objetivo es que no pierdan el ritmo en materias como la Física o las Matemáticas, que son de las que más se quejan", resalta Arévalo.