Veintidós personas murieron de meningitis en la región en 12 meses

La meningitis causó 22 muertes en la Comunidad de Madrid entre los meses de octubre de 2001 y 2002, periodo en el que 157 personas sufrieron la enfermedad, según un estudio de la Consejería de Sanidad. Esta mortalidad, causada principalmente por la meningitis C, es la más alta desde 1997, año en el que un brote causó 28 muertes y 272 afectados, sobre todo niños y adolescentes. Las campañas de vacunación emprendidas por Sanidad entonces han reducido los casos en estas edades, pero ahora la meningitis afecta más a los adultos y a los niños no vacunados adecuadamente.

Los técnicos de la Consejería de Sanidad muestran en el estudio su preocupación por la incidencia de la enfermedad entre los niños de los "colectivos sociales desfavorecidos", principalmente los inmigrantes y los de etnia gitana. Por este motivo, y porque el tipo de meningitis C que afecta a la región "pertenece a un clon hipervirulento", según el estudio, Sanidad recomienda al personal sanitario "reforzar" el calendario de vacunación entre los niños de estos grupos sociales.

El Servicio de Epidemiología de la Consejería de Sanidad dedica desde 1997 una especial atención a la incidencia de los distintos tipos de meningitis que afectan a la población regional. Los estudios, que se llevan a cabo cada año, miden el número de enfermos y de fallecidos en periodos de un año que van de octubre a octubre y que reciben el nombre de "campañas".

Desde la campaña 1996-97, en la que 28 personas murieron en la región por meningitis, la mortalidad no había sido tan alta. En la campaña 1997-98 murieron sólo ocho personas, pero desde entonces los fallecidos por meningitis no han dejado de crecer: 14 en 1998-99, 16 en la campaña siguiente, 18 en la 2000-01 y 22 en la última. Además, el estudio revela que "la Comunidad de Madrid presenta una tasa de incidencia superior a la media nacional, tanto para la enfermedad meningocócica total como para el serogrupo C".

La mayoría de los fallecimientos del último año estuvieron causados por esta variante de la enfermedad, que es especialmente letal y que mató a una de cada cuatro personas que la sufrió. Cincuenta y dos personas sufrieron la meningitis C, de las que 13 fallecieron. Menos mortífera fue la variante B, que afectó a 55 personas, de las que murieron cuatro. Los otros serogrupos de la meningitis afectaron a tres personas. Todas se curaron. En otros 47 casos, de los que cinco fallecieron, no pudo ser confirmada en los laboratorios la cepa o la bacteria causante.

Las campañas de vacunación emprendidas por el Gobierno regional tras el brote de 1997 han logrado reducir la incidencia de la meningitis y su mortalidad entre la población infantil y juvenil, la más afectada entonces. Si en la campaña 1996-97 un 55% de los 272 afectados tenía entre 0 y 4 años y otro 33% tenía entre 5 y 19, en la última campaña esos porcentajes han bajado a un 33% y un 27% respectivamente. En cambio, la población adulta, que en 1997 sólo sufrió un 12% de los casos, supone ahora un 40% de los enfermos.

La mayoría de los fallecidos en el último año se concentra en la franja de edad que va de los 15 a los 30 años y en los mayores de 65 años.

Este aumento de la incidencia entre la población adulta se explica porque hasta hace pocos años era el serogrupo B el que causaba la mayoría de meningitis en Madrid. "El serogrupo B afecta sobre todo a niños y adolescentes. Pero desde 1997 ha aumentado mucho la variante C de la enfermedad y ésta también afecta a la población adulta", explica María Ángeles Gutiérrez, del Servicio de Epidemiología.

Sanidad, sin embargo, no recomienda la vacunación masiva en la población adulta, porque "el riesgo de un adulto sano de padecer la meningitis C sigue siendo tan pequeño que no tiene sentido emprender campañas generales entre la población", añade Gutiérrez.

Tras el brote de 1997, la Consejería de Sanidad ha emprendido dos campañas de vacunación masiva en la población infantil y juvenil para la meningitis C. No existe vacuna para el serogrupo B. La primera campaña se desarrolló a finales de 1997 para la población de entre 18 meses y 19 años.

La segunda, con una vacuna mejorada, a finales de 2000 en niños menores de seis años. En los dos últimos años, 408.000 niños han sido vacunados en la región contra la meningitis. La vacuna contra esta enfermedad ha sido introducida en el calendario vacunal infantil, por lo que todos los niños ya la reciben en tres dosis durante su primer año de vida.

El estudio ha constatado que la extensión de la vacuna es eficaz, especialmente entre los protegidos en la segunda campaña de vacunación. La población vacunada es la que ahora tiene entre 0 y 24 años. Sin embargo, el estudio revela que quedan grupos de población infantil que, pese a que deberían estar vacunados, en realidad no lo están o no lo están convenientemente. El 71,4% de los niños y adolescentes que ha enfermado, pese a que deberían estar vacunados, destaca el estudio, "pertenece a grupos sociales desfavorecidos (inmigrantes y de etnia gitana)".

Por ello, los autores del informe creen que los profesionales de la sanidad pública "deben aprovechar todas las ocasiones disponibles para completar el calendario vacunal" entre estos grupos de población. Además de extremar esta vigilancia, el estudio recomienda que el Gobierno regional emprenda "intervenciones específicas" para promover la vacunación entre los niños inmigrantes y de etnia gitana.