Profesores que se ponen a punto

Tener un ordenador en clase, saber cómo se manda un correo electrónico o cómo se busca información en la Red no es suficiente para el cambio pedagógico que supone utilizar las nuevas tecnologías en los colegios e institutos. Integrar las nuevas tecnologías en la enseñanza de materias como Matemáticas, Lengua o Historia supone dar un paso más. "Lo primero que tiene que darse es una alfabetización técnica, una nueva forma de enseñar", señalan los expertos. Y, actualmente, la mayoría coincide en que la formación de los profesores en este campo es "bastante escasa".

Gran parte de los docentes no ha recibido instrucción alguna sobre cómo aplicar y sacar provecho de las tecnologías en su asignatura. Y, paradójicamente, las nuevas generaciones están acostumbradas a moverse con más soltura en el mundo de los ordenadores, la televisión y el vídeo que sus propios profesores.

El objetivo es formar 'locomotoras', docentes que animan a usar las tecnologías en el centro

Los datos están ahí: sólo el 20% de los docentes españoles usa Internet en el centro, una media de 20 minutos semanales, mientras que la media europea asciende al 36% una vez a la semana durante una media hora, según el Eurobarómetro European youth into the digital age, elaborado por la Comisión Europea el año pasado.

De ahí que el reto sea enseñar a los docentes no sólo cómo funcionan las nuevas tecnologías sino qué diseño educativo se puede hacer basado en ellas. Un buen ejemplo de cómo hacerlo es el master virtual en Nuevas Tecnologías aplicadas a la Educación que ofrece el Instituto Universitario de Posgrado (IUP), promovido por la Universidad de Alicante, la Autónoma de Barcelona, la Carlos III y Santillana Formación, empresa especializada en la formación de adultos a través de Internet. Su objetivo es formar a docentes para que éstos lleguen a utilizar las tecnologías de una manera tan habitual y cotidiana como hacen ahora con la pizarra. Dirigido a profesores y maestros, pedagogos, asesores, supervisores, directores y gestores escolares, el master les proporciona habilidades pedagógicas, tecnológicas y organizativas para integrar las tecnologías en el aula pero también en el centro escolar donde trabajan.

Veamos un ejemplo de cómo se pueden aplicar las tecnologías en una asignatura concreta después de haber cursado este master. Una profesora de Ciencias Sociales quiere explicar a sus alumnos de 12 años el concepto de ciudad. Una de las primeras cosas que hará será enseñarles a utilizar los buscadores más efectivos y las formas de bucear en Internet para conseguir el máximo de información sobre, por ejemplo, A Coruña a través de revistas, publicaciones, periódicos o foros que hay colgados en la Red.

La profesora explicará más adelante a sus alumnos cómo bajar ficheros, imágenes o vídeos de Internet y cómo reunir todos esos datos en una tabla de un documento de Word. Además, les mostrará cómo hacer presentaciones elaboradas con el programa Power Point que incluyan textos, tipología de letras, inserción de imágenes e incluso vídeos capturados de Internet sobre distintas urbes españolas.

Otro día, la profesora propondrá a sus estudiantes debatir a través de un chat con alumnos de otro colegio para que compartan información sobre sus respectivas ciudades. También organizará una videoconferencia en el que un experto hable durante una clase sobre desarrollo sostenible a través de un ordenador conectado a un proyector. Por último, puede enseñarles a sus alumnos a crear una pequeña página web sobre todos los conocimientos que hayan adquirido.

Hay que tener en cuenta que las nuevas tecnologías no deben nunca concebirse como un sustituto de los libros de texto, sino como un complemento. Así, una de las alumnas de este master, la profesora de Lengua y Literatura María Jesús Martín, cuenta alguna de las aplicaciones que podría tener las nuevas tecnologías en su asignatura: "Por ejemplo, con una pizarra electrónica podría enseñar a los alumnos aspectos lingüísticos consultando diccionarios virtuales o páginas muy concretas que hay colgadas en la Red sobre esta materia". Esta profesora reconoce que cuando empezó el master era una "analfabeta digital".

Otra de las finalidades de este curso de posgrado es contribuir a formar locomotoras, es decir, personas que crean en las nuevas tecnologías como herramienta pedagógica de futuro y que sean capaces de arrastrar a esta nueva forma de enseñar a otros profesores del centro donde trabajan. El master se imparte de manera virtual a lo largo de 10 meses, con un total de 500 horas lectivas equivalente a 50 créditos y requiere una media de estudio de tres horas diarias. Se parte de nivel tecnológico cero.

Otra alumna del master, la profesora de Informática Pilar Álvarez, explica que las ventajas de incorporar las Nuevas Tecnologías a la educación son múltiples. "Despierta el interés de los alumnos, pues es una herramienta cercana a ellos; les proporciona acceso a la información de todo tipo, muy tangible y fácil de encontrar, y les facilita el aprendizaje, pues ellos participan activamente en él", señala.

El segundo gran objetivo de este master es integrar las tecnologías como herramienta de gestión en el centro escolar mediante un programa de ordenador. Con él se pueden crear bases de datos para llevar el control de los alumnos (su evolución, horarios de los profesores, disposición de las aulas) así como una intranet (red limitada dentro de un centro) donde colgar la revista del colegio, el menú del comedor u otros datos de interés. Otra de las partes de este master está dirigida a enseñar a sus alumnos una vez que hayan creado un material multimedia a cómo sacarle provecho tanto comercialmente (vendiendo los contenidos a empresas de formación o de juegos educativos) o compartiéndolo con otros profesores.