Washington espera acelerar el voto de la nueva resolución

EE UU ya no quiere esperar y ha decido apurar sus esfuerzos diplomáticos para conseguir la próxima semana votos suficientes a su proyecto de resolución. Lo hará después de la comparecencia, este viernes, del jefe de los inspectores, Hans Blix, a la que asistirán varios ministros de Exteriores, y que promete convertirse en un nuevo enfrentamiento público entre los partidarios de la guerra y los que prefieren un desarme pacífico.

Aunque la situación en el Consejo sigue bloqueada, Washington no piensa por ahora actuar al margen de la ONU. "No creo que tengamos que llegar a ese extremo. Seguimos trabajando con nuestros colegas para conseguir del respaldo mayoritario a nuestra resolución", dijo el embajador estadounidense ante la ONU, John Negroponte. "Estamos a medio camino, no hay señales de que vayamos a dar marcha atrás", indicó un diplomático británico.

En una entrevista con la radio alemana RTL, el jefe de la diplomacia estadounidense, Colin Powell, aseguró ayer que tomará una decisión final "a principios de la próxima semana". El portavoz de la Casa Blanca, Ari Fleischer, indicó incluso que una votación podría producirse el lunes. La semana pasada, EE UU, el Reino Unido y España presentaron un proyecto de resolución que acusaba a Irak de haber desaprovechado la "última oportunidad" para desarmarse pacíficamente.

El texto está sobre la mesa, pero no ha llegado a ser objeto de debate. La atmósfera está "tan cargada", describieron fuentes de la ONU, que cualquier detalle paraliza el Consejo. Ayer tardó tres horas en decidir la fecha definitiva y el formato de la comparecencia de Blix que tendrá lugar este viernes. Será muy similar a las precedentes: pública y crucial.

Los estadounidenses preferían discusiones privadas para evitar encontrarse públicamente en minoría. También estimaban que sería más difícil para los países indecisos (en principio, Angola, Guinea, Camerún, Pakistán, México y Chile), que tienen la clave de la votación, cambiar de opinión ante las cámaras. Los ministros de Exteriores de Francia y Alemania ya han anunciado que asistirán. Sin duda, habrá más. El embajador guineano, que este mes asume la presidencia rotativa del Consejo, indicó que la ministra española, Ana Palacio, y el jefe de la diplomacia siria, Faruk al Shara, tenían previsto estar en Nueva York.