Exteriores envía el arte de Millares, Laffón y Úrculo a Tokio, Manila y Pekín

Las exposiciones de Manolo Millares, Carmen Laffón y Eduardo Úrculo en Tokio, Manila y Pekín abren la próxima semana el programa Arte español en el exterior dedicado a Asia. Las muestras están organizadas por el Ministerio de Asuntos Exteriores y la Sociedad Estatal para la Acción Cultura Exterior (Seacex), que desde el año pasado hacen circular la obra de una docena de artistas de la segunda mitad del siglo XX por Europa y América.

"El proyecto, con una clara consolidación, tiene la vocación de impulsar la política cultural y recuperar un tiempo perdido en la proyección exterior del arte español", declaró ayer Miguel Ángel Cortés, secretario de Estado para la Cooperación Internacional y para Iberoamérica, en la presentación de las exposiciones, con asistencia de Felipe Garín, presidente de la Seacex.

Cortés destacó la difusión de los catálogos de las muestras en los museos de arte contemporáneo de todo el mundo. "El programa se centra en la plástica y la contemporaneidad, donde hay mucho terreno que recuperar. Los museos de arte contemporáneo en España se han realizado en los últimos 25 años".

Pinturas blancas

Eva Millares, hija del pintor y comisaria de la exposición Millares. Luto de Oriente y Occidente, que se presentará el 10 de marzo en el Museo Sen Oku Hakuko Kan, de Tokio, ha seleccionado 38 obras, entre arpilleras y papeles, con predominio de las pinturas en blanco de la última etapa. "En este momento difícil para el mundo, estas obras son de denuncia y solidaridad. En contra de algunas opiniones, creo que el Millares de la pintura blanca es la etapa más dramática, de tierra calcinada, vacío y luz fuerte, a través de las arpilleras, su lenguaje estético, y animales del desierto".

La pintora Carmen Laffón señaló que presentará medio centenar de obras en el Museo Nacional de Filipinas, en Manila, que inaugurará la Reina el 5 de marzo. Con el pintor Gerardo Delgado como comisario, ha seleccionado cuadros sobre objetos de los años setenta y vistas de Sanlúcar de Barrameda y del Coto de Doñana, con "la luz, el clima y los espacios" de unos paisajes que observa desde su estudio. También figuran retratos, esculturas y dibujos.

El pintor Eduardo Úrculo se presentó ayer como "el hombre de los bodegones", al ser la naturaleza muerta el asunto de la exposición, elegido por el comisario, Fernando Castro Flórez, que inaugurará la Reina el 8 de marzo en el Museo Millennium Monument, de Pekín. "Es un hallazgo exportar arte en lugar de castañuelas", afirmó el artista. Los 50 bodegones recorren su trabajo artístico desde los años sesenta en París y terminan con los recientes bodegones neocubistas, que presentó en la galería Metta, con "una dimensión barroca, lúdica y trágica", según el comisario.