Montilla tacha de "mentiroso" a Mas y dice que no puede ser presidente

El conseller en cap del Gobierno catalán, Artur Mas, no puede ser el próximo presidente de la Generalitat porque es un "mentiroso", afirmó ayer el primer secretario del Partit dels Socialistes (PSC), José Montilla, que agregó que Cataluña no puede estar dirigida por "un señor que lo que quiere es vender coches de segunda mano y, además, trucados". El dirigente socialista denunciaba así la "manipulación" de encuestas electorales por parte del Gobierno catalán y la "información falsa" que el Ejecutivo ha transmitido a la Cámara catalana en datos referidos a la construcción de vivienda o a las listas de espera.

Montilla se preguntó: "¿Qué credibilidad tiene un gobierno que manipula las encuestas, que manipula unos documentos oficiales que entrega en el Parlament y que además no es la primera vez que lo hace?". A renglón seguido, el primer secretario del PSC atribuyó al conseller en cap y a su equipo de asesores, la "responsabilidad directa" de estos casos.

Montilla advirtió, además, de que en Convergència i Unió (CiU) "son conscientes" de que si pierden las próximas elecciones autonómicas, que se deben celebrar en otoño, quedarán "en una situación muy difícil" y que, por tanto, "irán a por todas y jugarán sucio" con tal de ganar los comicios.

El dirigente socialista destacó que "Mas es un conseller en cap que miente" y advirtió que, en estas circunstancias, no puede ser el próximo presidente de Cataluña. "Yo me pregunto si alguien que es un mentiroso puede presidir Cataluña. Francamente, pienso que no", dijo el primer secretario del PSC.

La campaña "será dura"

"Creo que Cataluña necesita un presidente que, como Pasqual Maragall, tenga un proyecto de futuro para este país, y no un señor, como Mas, que lo que quiere es vender coches de segunda mano y, además, trucados", insistió. El dirigente del PSC también advirtió que la campaña electoral de las autonómicas será "dura", porque CiU y el equipo de Mas "son capaces de todo", ya que no tienen "ni principios ni escrúpulos".

Dentro de esta estrategia que Montilla juzga "falta de escrúpulos" por parte de CiU, el primer secretario del PSC afirmó que la federación nacionalista estudia ahora llevar de nuevo a los tribunales el caso Movilma, relativo a varias concesiones de obras del Ayuntamiento de Barcelona. Las obras se concedieron a una empresa propiedad de dirigentes locales del PSC cuando Pasqual Maragall era alcalde de la ciudad. Montilla recordó que este caso ya fue archivado por los tribunales y que el informe que elaboró la Sindicatura de Cuentas "no aporta nada nuevo". El dirigente socialista sostuvo que el objetivo de CiU con estas denuncias es "tapar los casos de corrupción que les afectan y que aún están vivos judicialmente".