El comité científico del CSIC asegura que no se abrirán nuevas grietas en el 'Prestige'
Las fugas fueron causadas por el golpe de la proa y la popa del barco contra el fondo marino
El comité científico del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) designado por el Gobierno para que aporte soluciones al futuro del petrolero hundido a 131 millas del cabo de Finisterre informó ayer de que no se abrirán nuevas grietas en el Prestige y que las estructuras del buque no se están rompiendo. La presión en el fondo marino donde están la proa y la popa del barco es superior a 350 atmósferas, pero al estar abiertas o rotas las tuberías de fondo de carga y descarga de combustible de cada tanque, todos los depósitos han compensado esa presión, según indica el informe.
"La única presión que hay sobre la estructura del casco del buque es la diferencia de presiones provocada por la menor densidad del fuel que hay dentro", y el casco del barco está diseñado para soportar una presión unas 30 veces superior. Con esta conclusión científica se resuelve una de las incertidumbres respecto al futuro de la popa y la proa del Prestige y su posible rotura por efecto del tiempo y la presión.
El comité científico añade en su informe que la diferencia de presiones tampoco es suficiente para provocar nuevas deformaciones en la estructura del Prestige. Las fugas que se registraron con posterioridad a las primeras inmersiones del submarino francés Nautile no son nuevas fugas, advierten los expertos, sino que no se identificaron en los dos primeras descensos del batiscafo porque no era posible acceder a determinadas partes del buque.
Cuando se retiraron los obstáculos que impedían el reconocimiento de las estructuras se descubrieron las fugas que habían pasado inadvertidas anteriormente.
Veinte fugas
En total, resume el comité científico, se han identificado en el petrolero hundido 20 fugas, sumando las de proa y las de popa. Tras la última inmersión del Nautile, el pasado 21 de diciembre, quedaron cerradas completamente dos grietas, y parcialmente otras tres. Unas 125 toneladas diarias de fuel se escapaban por esas grietas.
"Las grietas que se han producido en los pecios han sido seguramente causadas por el impacto de ambos trozos del casco contra el fondo marino", explica el comunicado. "En este momento sólo actúan sobre el casco las presiones debidas a las diferencias de densidades. Estas presiones no pueden producir la concentración de tensiones necesaria para ocasionar nuevas grietas o para agrandar las existentes".
También descarta el comité científico del CSIC que se vayan a abrir nuevas vías de fuga por escotillas o tapas de registro del barco. La apertura de algunas tapas se ha debido a la deformación local provocada por el golpe del barco contra el fondo . "Con ambos pecios estabilizados sobre dicho fondo no hay ninguna fuerza capaz de abrir nuevas fugas", concluyen los expertos.
En los tanques del Prestige, según los cálculos facilitados por el Gobierno, aún quedarían más de 50.000 toneladas de fuel.
El comité científico del CSIC llegó a indicar en su primera explicación a los medios de comunicación que el combustible podría continuar saliendo del barco durante un periodo de entre cinco y 39 meses.
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