Demagogia y educación
Desde el Ministerio de Educación se acusa de demagogia a la oposición cuando ésta afirma que el gobierno del Partido Popular favorece claramente a la enseñanza privada en detrimento de la pública. Vayamos, pues, con los hechos.
Tengo tres hijos que estudian en el colegio público Mora Puchol, de Alicante. Dos de ellos -en tercero y cuarto de primaria, respectivamente- están sin profesor de inglés desde principio de curso. La Conselleria de Educación hace oídos sordos a las reclamaciones de padres y madres, y nada parece augurar que el problema vaya a tener solución en los próximos meses.
Uno se pregunta si es simple y llana desidia, manifiesta ineficacia, afán de desprestigio, o si responde más bien a un calculado plan de ahorro. Pero así las cosas, y con una amarga sensación de indefensión, hay quien ya se plantea matricular a su hijo o hija en otro centro -privado, claro- para el próximo curso.
Sin embargo, quienes creemos firmemente que una educación pública de calidad es el mejor recurso para contrarrestar las desigualdades sociales de partida, y el mejor instrumento para construir una sociedad más justa y cohesionada, no queremos desertar. Pero tampoco estamos dispuestos a callar y a resignarnos, como explícitamente se nos pide desde la Dirección Territorial de Alicante.
Nuestros hijos no aprenderán inglés, pero aprenderán al menos a resistir con dignidad. Que alguien nos eche una mano.