La dama de la prensa, entre rejas

La noticia cayó como una bomba en medios judiciales, periodísticos y políticos de Argentina. Ernestina Herrera de Noble, de 77 años, presidenta del Grupo Clarín, el imperio mediático más importante del país suramericano, está detenida desde el martes por la noche por el presunto delito de apropiación de hijos de detenidos-desaparecidos durante la última dictadura militar (1976-1983). La todopoderosa señora De Noble, que también ocupa formalmente la dirección del diario Clarín, el de mayor difusión de América Latina, fue trasladada por efectivos de la Policía Federal desde su domicilio, en el elegante barrio de Martínez, en Buenos Aires, a la división policial de Delitos Complejos.

Declaró que encontró en su puerta dos bebés durante la dictadura militar argentina

Un hombre tan controvertido como audaz, el juez federal Roberto Marquevich (encarceló al ex dictador Jorge Rafael Videla), ha firmado una orden de consecuencias incalculables, a efectos de que la detenida preste declaración indagatoria sobre los presuntos delitos de supresión de estado civil, retención y ocultamiento de menor y falsedad de documento público, con relación a los hijos adoptivos de la señora De Noble, Marcela (26 años) y Felipe (24). El juez Marquevich instruye una antigua causa, que fue reabierta el 25 de junio del año pasado a raíz de una denuncia presentada por la organización Abuelas de Plaza de Mayo sobre la identidad de los dos hijos adoptivos de la presidenta del Grupo Clarín. Además de la detención, el magistrado ordenó la realización, "en forma compulsiva y por intermedio de la fuerza pública, en caso de resultar necesario", de las pruebas de ADN a Marcela y Felipe mañana en el hospital Durand. El objetivo de los análisis es establecer la verdadera identidad de los dos jóvenes y comprobar si tienen lazos sanguíneos con Estela Gualdaro y María Amelia Herrera de Miranda, que habían presentado anteriormente sendas querellas. A lo largo del año pasado, los dos hijos adoptivos se negaron a someterse a los análisis sanguíneos.

A la sorpresa inicial por el paso dado por Marquevich siguió la indignación expresada en distintos medios del Grupo Clarín, que ha emitido un duro comunicado en el que califica la detención de la señora De Noble de "abuso" y "gravísimo precedente institucional". La nota publicada por el diario concluye asegurando que su directora "seguirá cooperando firmemente con la justicia, como lo ha hecho hasta ahora". Walter Rodríguez, secretario de Marquevich, estima que la supuesta colaboración con la justicia por parte de la detenida brilló por su ausencia. Con enorme cautela, dada la trascendencia del caso, el colaborador del magistrado sí deja claro que la orden de detención se produjo porque "hay sospechas fundadas de que esta persona cometió un delito".

Idénticas sospechas tienen las Abuelas de Plaza de Mayo, según explica su presidenta, Estela de Carlotto, que recuerda los intentos fracasados de la organización para conversar con la señora De Noble: "Hace cinco años fuimos varias abuelas, nos recibió el señor Héctor Magneto , nos escuchó, se quedó asombrado y nos prometió facilitarnos los datos sobre la adopción. Nunca nos entregó nada". La presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo sabía que en su investigación el juez Marquevich iba encontrando "serias irregularidades", pero "no tenían ni idea" de que se disponía a dictar una orden de detención.

Carlotto evita calificar la noticia de buena o mala. "A nosotras lo que nos importa son los chicos. Será una buena noticia si esta señora resulta ser culpable. Pero antes hay que demostrar su culpabilidad". Menos comedida se muestra Berta Schubaroff, abuela de María Macarena, hija de detenida-desaparecida y nieta del escritor argentino Juan Gelman, encontrada en abril de 2000 en Montevideo después de una intensa campaña internacional. "Ha sido como un regalo de fin de año. Cuando se realicen los análisis de sangre, si se comprueba que son hijos de desaparecidos, la señora De Noble tendrá que ir presa, como tienen que ir presos todos los apropiadores de bebés".

Ernestina de Noble, enfermera, se casó con el abogado, legislador y periodista Roberto Noble, que fundó el diario Clarín en 1945. Al enviudar, en 1969, la señora heredó un poderoso medio de comunicación que es referencia en Argentina. En 1976, el año del golpe militar, la nueva reina del emporio mediático declaró haber encontrado en la puerta de su casa a dos bebés, que acabó adoptando. Casi 26 años después, el juez Marquevich duda de esta versión y sospecha que aquellas criaturas fueron secuestradas de sus padres, hoy desaparecidos. Las pruebas de ADN despejarán la duda.