Educación Infantil
Señora doña Carmen Raya, delegada de Educación, espero que con esta carta no se explique el motivo que me ha llevado a denunciar este problema en los meses previos a las elecciones, porque tampoco me explico yo que desde el día 24 de octubre que solicité audiencia con usted no se halla dignado ni a contestarme, no a dármela sino a contestarme. Quiero denunciar la siguiente historia: Una mañana gris de otoño mi móvil se encontraba en el modo "vibrar" porque tenía una reunión de trabajo, no obstante, antes de comenzar la misma lo consulté y cuál fue mi sorpresa cuando vi que tenía cuatro llamadas perdidas del colegio público Genil. De inmediato llamé a mis superiores para que anulasen mi reunión y pidieran disculpas.. Con el corazón encogido comencé a correr como una gacela a ver qué le había ocurrido a mis hijos y cuando más me acercaba más fuerte latía mi corazón. Llamé a la puerta del colegio asustada y preocupada y casi me desmayo al ver el accidente que había sufrido mi hijo de dos años, "se había cagado", sí, señores, como ustedes lo leen, y para más desolación y tristeza su hermano, de cuatro años, lo abrazaba y lloraba a su lado porque otros niños se reían de él. Con lágrimas en mis ojos les explico que no pasa nada, que su mamá está allí para cambiarlo y cuidarlos, que no se asusten, que si le duele el culito mamá por la noche le echará una crema y se lo curará y que su mamá va a luchar contra todo un sistema que se tilda de progresista para que eso no le vuelva a ocurrir.
Señora delegada y señora consejera, no me contesten ustedes que ya han progresado bastante porque no es obligatoria la enseñanza infantil y ustedes la ofrecen, pero si no son capaces de ofrecerla dignamente no lo hagan. De qué sirve vender el Decreto de Apoyo a las familias, las aulas matinales, etc., si todavía un montón de padres que tienen y quieren trabajar dejan a sus niños pequeñitos en un lugar donde no se les ofrece lo que necesitan para formarse como seres humanos. En Granada y provincia sólo existen nueve centros que dispongan de personal de apoyo a la educación infantil ¿Creen que han cumplido ya su programa? ¿Qué nos venderán para las próximas elecciones? Qué triste es creer, cada día menos, en quienes alardean que luchan por mejorar nuestra sociedad. Los niños que son nuestro futuro no deberían de sufrir la incompetencia de nuestros políticos. Si estas líneas les parecen fuertes, más fuerte es para mí pensar que cada día puedo encontrarme a mis niños en las mismas lamentables circunstancias, por ello aunque se enfaden les ruego encarecidamente pongan solución inmediata para que mis hijos y otros tantos más no sufran física ni psíquicamente en los colegios.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.