El PP replica al PSOE sobre el presupuesto de los planes de Zaplana

El PP, a través de su portavoz en el Senado, Esteban González Pons, reclamó ayer la dimisión de Jordi Sevilla, máximo responsable del área económica del PSOE tras acusarle de "no saber leer los Presupuestos". El PSOE había sugerido la dimisión del ministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, tras acusarle de presentar múltiples planes sociales sin respaldo presupuestario. Para que sí lo tuvieran, el primer partido de la oposición presentó una serie de enmiendas en el Senado a los Presupuestos de 2003.

González Pons detalló ayer cuáles son las partidas presupuestarias que desarrollan las promesas sociales de Zaplana. El portavoz del PP en el Senado ridiculizó alguna de las enmiendas socialistas con argumentos como los siguientes:

- Madres trabajadoras. Los socialistas piden 300 millones de euros para que se abonen los 100 euros que el Ministerio de Hacienda ha prometido a las madres trabajadoras con hijos menores de tres años. Según el PP, esa partida está incluida en las previsiones de ingresos del IRPF, pues los 100 euros son "un impuesto negativo" que, o se abona a quienes no tienen que declarar IRPF, o se deduce a quienes sí lo pagan.

- Tercera edad. El PSOE propone dotar con tres millones de euros a la Secretaría de Asuntos Sociales para financiar viajes a las personas mayores. El PP replica que los viajes para mayores están recogidos, con 55 millones de euros, en el presupuesto del Imserso y no en esa Secretaría de Estado. González Pons añade que con los tres millones de euros del PSOE se podrían pagar viajes a 27.000 personas mayores y que el Gobierno, con sus 55 millones de euros de presupuesto, los financiará para medio millón de pensionistas.

- Permiso de paternidad. El PSOE pedía con ella la creación de un permiso de paternidad acumulado al de maternidad. El PP replica que a ese permiso acumulado nunca se comprometió el Gobierno y que Zaplana sólo dijo que convendría "abrir un debate" sobre ello. De paso, el portavoz parlamentario del PP acusó a los socialistas de pretender cambiar cinco leyes con una sola enmienda.