"Chávez ha puesto a todo el mundo en el ring"
En un país partido en dos, que no admite ya medias tintas, la mayoría de los medios de comunicación privados ha tomado partido por quienes defienden la salida del poder del presidente de Venezuela. En primera línea de la protesta civil contra Hugo Chávez marcha el diario El Nacional, uno de los de mayor solera y tirada de Caracas. Su editor y director, Miguel Henrique Otero, afirma que el mandatario no les ha dado otra opción y recurre a un símil pugilístico para justificar la agresividad de la prensa venezolana para con el presidente: "Él puso a todo el mundo en el ring, a todas las instituciones, incluyendo a los medios de comunicación". No obstante, Otero niega que su diario haya perdido imparcialidad ante los hechos. "Hoy tenemos más credibilidad y una relación más afectiva con nuestros lectores", asegura en una entrevista con EL PAÍS.
Otero, que visitó recientemente Madrid para participar en el jurado de los premios internacionales de periodismo Rey de España, piensa que Chávez está cada vez más solo y que la oposición, por el contrario, no deja de sumar apoyos. "Las clases populares están dejando de ser chavistas", dice. Según sus cálculos, el "núcleo duro" chavista no alcanza más del 15% de la población de Venezuela, mientras que al menos un 50% están contra el presidente. "Todo lo que es institución está contra Chávez: la Universidad, los sindicatos, la prensa, los intelectuales...".
Este periodista, de 54 años, nieto del fundador de El Nacional e hijo del primer director del diario, cree que es real el peligro de un enfrentamiento civil en Venezuela, pero vaticina que la salida de la crisis será consensuada. Sostiene que el proceso político que dejará atrás a Chávez será pilotado por uno de los hombres fieles al presidente, como ha ocurrido en otros momentos de la historia de Venezuela. "Lo ideal sería, para la transición, que la dirigiera alguien afín a Chávez", afirma. ¿Quién podría ser? Otero da tres nombres: el gobernador de Aragua, Didalco Bolívar; el vicepresidente de la Asamblea, Rafael Simón Jiménez; y Ali Rodríguez, presidente de Petróleos de Venezuela (Pdvsa) y ex secretario general de la OPEP.
Otero confiesa haber votado a Chávez por estar de acuerdo con su proyecto de desmantelamiento de las instituciones de la IV República, pero se lamenta de que el presidente "se paró ahí" y no ha hecho nada por mejorar las condiciones de vida de las clases populares, ni en vivienda, ni en salud ni en educación. Sobre el futuro, Otero baraja varias opciones. "El peor escenario es el magnicidio", afirma, "y el segundo peor, el golpe militar". Otro camino, explica, sería recurrir al artículo 350 de la Constitución, que permite al pueblo y a los militares venezolanos "desoír" a las autoridades si no respetan las normas de la democracia y los derechos humanos. Un último escenario, subraya, sería una salida electoral, como la que negocian representantes del Gobierno y de la oposición bajo los auspicios de César Gaviria, secretario general de la OEA.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.