Fraga: "Hacemos frente a una catástrofe en el mar y a otra política"

El Gobierno y la Xunta se movilizaron ayer en un intento de contrarrestar los efectos de una manifestación que de antemano se preveía multitudinaria. El vicepresidente primero, Mariano Rajoy, convocó a los representantes de las cofradías de pescadores de la zona afectada a la misma hora que en Santiago empezaba a juntarse la muchedumbre que asistía a la protesta por el desastre causado por el Prestige. El presidente de la Xunta, Manuel Fraga, celebró una reunión extraordinaria de su gabinete para reiterar la solidaridad y el apoyo a las víctimas del desastre. "Estamos haciendo frente a dos catástrofes, una en el mar y otra política que algunos quieren crear basándose en la demagogia y, en más de un caso, en la falsedad", dijo Fraga tras la reunión de su Gobierno.

Rajoy, acompañado del ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, y del consejero de Pesca de la Xunta, Enrique López Veiga, convocó a los representantes de los pescadores en Caión (A Coruña), cuya cofradía se ha distinguido por su actitud condescendiente con las administraciones desde que se produjo el desastre del Prestige. Allí el vicepresidente aprovechó las preguntas de los periodistas para comentar la manifestación que se iba a celebrar en Santiago y reprochar su actitud al secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero. "Si es el líder de la oposición, que venga a dar la cara y debata conmigo en el Congreso", señaló Rajoy, quien volvió a recriminar a los socialistas que intenten obtener "rentabilidad política" de una catástrofe.

"Pescar en río revuelto"

El vicepresidente afirmó que en la manifestación de Santiago participaba gente "que va de buena fe", pero también otros "que pretenden pescar en río revuelto". Rajoy recordó que el PP gallego intentó sumarse a la marcha pero los convocantes se negaron a retirar la exigencia de dimisiones, lo que consideró "injusto" porque, según él, el Gobierno no puede ser responsabilizado de un accidente. "Es muy fácil manifestarse mientras otros trabajamos 14 o 15 horas al día", concluyó.

Fraga no negó la magnitud de la protesta, pero resaltó: "Van a ser muchos más los que van a apoyar la acción de los gobiernos de Bruselas, de España y de Galicia". No obstante, ironizó sobre el desarrollo de la marcha, a la que llamó "manifestación huevuda", por los huevos que grupos de radicales lanzaron contra el líder del PSOE. Para el presidente de la Xunta, ahora hay que esforzarse en paliar las consecuencias del desastre y no en buscar responsabilidades políticas. "Ya llegará la hora de pedirlas, que aprovecharemos para desenmascarar a más de uno", avisó.

La Xunta aprobó ayer una declaración institucional en la que agradece la solidaridad de los voluntarios y la colaboración del sector pesquero y marisquero. Y anunció que pedirá a la UE que Galicia se beneficie del Fondo de Solidaridad ante Catástrofes.