El 33% de los seropositivos se siente discriminado socialmente

Un tercio de los seropositivos vascos ha sentido alguna vez el rechazo de la sociedad. Veinte años después de la detección de los primeros casos de sida, los portadores del VIH que no han desarrollado la enfermedad, tienen cierto temor de revelarlo porque la discriminación persiste, aunque sea menor. Pese a que el 98% de los seropositivos ha confiado su situación a algún miembro de su familia, sólo un 22% ha informado a algún compañero de trabajo, según una encuesta realizada por el Departamento de Sanidad a cien portadores del VIH.

El consejero, Gabriel Inclán, destacó positivamente en la presentación de la encuesta que ninguno de los consultados opina que hoy existe más discriminación que hace diez años, pero criticó que aún haya gente que dé la espalda a los portadores del VIH. Inclán deploró que mientras un enfermo de cáncer recibe inmediatamente un apoyo generalizado, los seropositivos -y los enfermos psiquiátricos, añadió- aún teman revelarlo.

El 71% de los consultados, la mayoría de los cuales se infectó por compartir jeringuillas, se siente menos rechazado que entonces. El 28% considera que la situación es similar. Destacó el consejero que las mujeres seropositivas son el colectivo más rechazado.

Mañana es el Día Mundial contra el Sida y Onusida dedica esta vez su campaña, bajo el lema Vive y deja vivir, a luchar contra el rechazo hacia los seropositivos. El titular de Sanidad, que compareció junto al director del Plan Vasco del Sida, Daniel Zulaika, subrayó que la discriminación de los portadores del virus del sida dificulta la prevención y el control de la enfermedad porque los afectados seropositivos temen el rechazo social.

La asociación T4 y las comisiones antisida de Álava y Vizcaya criticaron que ser seropositivo sea aún es un "estigma social" y advirtieron de que el desinterés de parte de la sociedad hacia el sida está generando guetos sociales. La de Vizcaya y T4 recalcaron que la mayoría de los enfermos viven el sida en auténtica soledad porque se les "niega un trabajo y una relación familiar, social y afectiva". Los tres colectivos insistieron en la importancia de que los adolescentes reciban una buena educación sexual y en la promoción del uso del preservativo para prevenir nuevos contagios.

Sanidad aprovechó para anunciar la apertura, ayer mismo, de una consulta pública especializada en enfermedades de transmisión sexual en San Sebastián. En Bilbao existe una desde hace décadas. Inclán explicó que, aunque la mayoría de los usuarios serán mujeres y hombres que ejercen la prostitución (de ellos el 85% son inmigrantes sin papeles), puede acudir cualquiera.

Inclán recordó que los nuevos casos de sida en Euskadi han descendido un 11% en lo que va de año (137 personas se han contagiado, dos tercios de ellas por contacto heterosexual) y la mortalidad, un 17%. Actualmente existen unas 3.000 personas en tratamiento con antirretrovirales, lo que supondrá un gasto de 21 millones de euros este año.