Los orujeros reclaman más control sobre el sector del aceite para evitar el fraude

Empresarios extractores de aceite de orujo han reclamado a las diferentes Administraciones la intensificación de los controles sobre algunas almazaras y extractoras para evitar el fraude en la producción de aceite. Los orujeros se quejan de la generalización de la técnica del "repasado" en las almazaras olivareras. Igualmente denuncian el funcionamiento de algunas extractoras de aceite de orujo que obtienen un producto de alta calidad y que comercializan el mismo para su mezcla con aceite de oliva.

El "repasado" consiste en apurar al máximo la masa aceituna para lograr la mayor cantidad de aceite de oliva, aunque el mismo sea de baja calidad con necesidad de refino para su consumo. Esta técnica está permitida y el aceite obtenido se puede calificar como oliva si la operación se hace en los mismos locales de la almazara. Con este sistema se lograrían anualmente unas 20.000 toneladas de aceite de oliva de baja calidad, algo que no se entiende en campañas con elevados excedentes.

Heriberto Turu, ex directivo de la Federación de Industrias Extractoras de Orujo denuncia sobre todo el funcionamiento de algunas extractoras ligadas a almazaras, dedicadas a la obtención de un aceite de orujo de una gran calidad. En algunos casos, según esas fuentes, ese aceite se comercializa como aceite de orujo, mientras en otros se mete en los canales del aceite de oliva para su mezcla, algo prohibido por la normativa actual.

Medios ligados al sector del aceite de oliva estiman que si algunos orujeros tiene que hacer alguna denuncia sobre irregularidades en este mercado, la deberían hacer en los juzgados y no en los medios de comunicación.

El consumo de aceite de orujo experimentó en la última campaña una caída del 50% consecuencia de la crisis sufrida por el sector en junio de 2001. Frente a una demanda en el mercado interior de 60.000 toneladas, las ventas han bajado a solamente unas 30.000 toneladas. Por contra, debido a la caída de la producción de aceite de oliva en terceros países, aumentaron desde 10.000 a unas 27.000 toneladas las exportaciones a Italia. No se ha logrado la recuperación de ventas en los países árabes.

En el último año, la Administración puso en marcha varias medidas para apoyar a las empresas y recuperar la demanda. Los industriales han recibido unos 12 millones de euros en créditos blandos y otros 800.000 euros para campañas de promoción del aceite de orujo, medidas que en ambos casos se han considerado insuficientes.