Hecha la ley...

La Ley del Tabaco, al menos en la Comunidad Valenciana contempla perfectamente los espacios donde no se debe fumar. Entre ellos, está todo el área de cualquier hospital, desde una consulta hasta la sala de máquinas. Está terminantemente prohibido fumar en un hospital.

Trabajo de fisioterapeuta en el Hospital Arnau de Vilanova de Valencia y, a la hora de almorzar, todos los días inhalo el humo de las personas que fuman en la cafetería del centro, arriesgando mi salud con la posibilidad de contraer cualquier enfermedad cancerígena. Las gestiones que he realizado hasta el momento han sido del todo infructuosas. He escrito a la Dirección del Hospital con la contestación de que se le había comentado el problema a la empresa concesionaria del bar. Sólo entonces pusieron un tímido cartel que prohíbe fumar en el pasillo de recogida de la comida o el café. Tras dirigirme a esta empresa, donde se me hizo caso omiso, me dirigí al Síndic de Greuges donde tampoco (y de esto hace más de seis meses) he recibido noticia alguna.

Esta mañana he decidido llamar a la Policía Local y muy amablemente han atendido mi reclamación; de alguna manera he conseguido hacer constar que se fuma en un hospital, en el año 2002, en el civilizado mundo occidental. Ni qué decir tiene lo que pasaría de acontecer esto en los Estados Unidos, donde hasta por la calle te llaman la atención si molestas con tu humo (prueben a oler humo de tabaco a las 8 de la mañana, recién levantados). No me voy a rendir hasta conseguir que se cumpla la ley. Y lo conseguiré.

La gran mayoría de ciudadanos intentamos vivir sanamente. Pero, aunque no seas fumador, no te puedes librar de estar exento de padecer un cáncer de laringe, de vejiga, etc.

Mi próxima acción creo que va a ser el volver a llamar a la Policía Local pero esta vez para que obliguen a la gente a tirar el cigarrillo. Estoy estudiando si la ley da margen para ello. Como he dicho, no tiraré la toalla hasta conseguir que el que quiera drogarse, lo haga él sólo.