"Sólo pedimos pasar el invierno"

"Que no nos echen de aquí hasta que por lo menos pase el frío. Sólo pedimos pasar el invierno" decía ayer Mijaíl Turishvili, de Georgia. Desde hace dos meses vive con su mujer y sus tres hijos en uno de dos cuarteles militares de Sant Andreu, ocupados por más de 200 inmigrantes de 30 países. "Vine aquí a buscar trabajo para poder mantener a mi familia, alquilar un piso y vivir tranquilo. Lo que pido es poder invitar a un té a mis amigos y hacer comidas para la familia", explica. En esta ocasión tiene dos interlocutores muy especiales: Miloon Kothari, relator de las Naciones Unidas para la Vivienda, y Virginia Dandan, presidenta del Observatorio para el Cumplimiento de la Declaración Universal de los Derechos Humanos en los Derechos Económicos, Sociales y Culturales (DESC). Ambos se encuentran estos días de visita en Barcelona y aprovecharon unas horas para acercarse anoche a los cuarteles de Sant Andreu. Querían conocer de primera mano los problemas de los inmigrantes. Sin apenas agua, con luz robada de la calle y el frío de noviembre entrando por las ventanas sin cristales, miembros del colectivo inmigrante, abogados y representantes de asociaciones de vecinos pidieron a Kothari y a Dandan que presionen para conseguir lo único que ahora verdaderamente necesitan los ocupantes de los cuarteles: tiempo. El pasado 7 de noviembre se cumplió el plazo que el Ministerio de Defensa había dado mediante requerimiento oficial para que desalojaran los cuarteles.