Aznar asegura ante el Congreso que España siempre apoyará a Estados Unidos

El presidente del Gobierno, José María Aznar, afirmó ayer en el Congreso que España estará 'siempre' con EE UU en su lucha contra el terrorismo, dentro de la que incluyó un eventual ataque contra Irak. Para justificar esta asimilación, acusó al régimen de Sadam Husein no sólo de 'intentar por todos los medios proveerse de armas de destrucción masiva', sino también de haber 'dado cobertura al terrorismo'. El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, le advirtió de que su grupo no apoyará una intervención unilateral sin autorización de la ONU. Lo mismo hizo CiU.

Una pregunta del Grupo Socialista permitió ayer a Aznar pronunciarse por vez primera en público sobre un posible ataque de EE UU contra Irak. Al contrario de lo que, según su entorno, dijo el martes telefónicamente a Bush, Aznar no afirmó en el Congreso que apoyará una intervención incluso sin permiso de la ONU, aunque lo dio a entender: 'Estaremos siempre con aquellos que con nosotros y como nosotros luchan por la causa de la libertad y contra el terrorismo'.

Aznar afirmó que Irak ha vulnerado sistemáticamente las resoluciones de la ONU y que es responsabilidad de su Consejo de Seguridad responder a este reto, por lo que consideró 'muy probable' una nueva resolución.

Para que resulte efectiva, agregó, hay que mantener una actitud 'muy firme', pues el regreso de los inspectores y la eliminación de las armas de destrucción masiva que supuestamente oculta Sadam Husein deben ser incondicionales y sin restricciones.

El portavoz del PP en la Comisión de Exteriores del Congreso, Gustavo de Arístegui, dijo a Efe que, aunque su grupo no renuncia a un nuevo pronunciamiento del Consejo de Seguridad, 'hay ya resoluciones sobradas' para legitimar una intervención.

En su breve discurso, Aznar pasó sin solución de continuidad de la lucha contra el terrorismo, que la sociedad española respalda, a la intervención contra Irak, que la mayoría rechaza, según las encuestas. Como único vínculo entre ambos temas citó la 'cobertura al terrorismo' del régimen de Sadam. Se trata de una acusación hasta ahora no probada, si se exceptúa la muerte el pasado agosto en Bagdad del terrorista palestino Abu Nidal, supuestamente a manos de los propios servicios secretos iraquíes.

Por primera vez en la historia de la democracia española, los principales grupos de la oposición no respaldaron ayer al Gobierno en una crisis internacional de este tipo. No sólo, como era previsible, se mostraron críticos IU y algunos partidos del Grupo Mixto, sino también PSOE y CiU.

En parte, Aznar se ganó esa soledad, pues, como le recordó Rodríguez Zapatero, no consultó a la oposición antes de trasladar su postura a Bush. Por ello, el líder socialista le exigió que 'consulte con el Parlamento cada paso que dé' y que busque el consenso nacional e internacional.

Le adelantó, no obstante, que su grupo es partidario de 'agotar todas las vías diplomáticas' y que 'no sería inteligente' una acción que divida a la coalición contra el terrorismo, incluidos los países árabes moderados, o a la propia UE. 'No vamos a respaldar la implicación de España en una acción militar unilateral de EE UU contra Irak si no hay respaldo del Consejo de Seguridad y de la comunidad internacional democrática', concluyó.

Por su parte, el portavoz de CiU en la Comisión de Exteriores del Congreso, Ignasi Guardans, criticó en los pasillos la 'imprudencia' de Aznar, pues 'dinamita' la política exterior y de seguridad común de la UE. Una intervención militar, agregó, supone correr 'riesgos ciertos' para afrontar una 'amenaza incierta' y su grupo no la apoyará sin el respaldo de la ONU.