La comisión técnica de la inmigración creada en Navarra en marzo no se ha reunido nunca

La comisión técnica creada en marzo para agilizar la tramitación de los expedientes de ciudadanos extranjeros en Navarra no se ha reunido nunca porque las dos entidades oficiales que la lideran, Gobierno de Navarra y Delegación del Gobierno, estiman que debe ser la otra parte la que tome la iniciativa. Mientras tanto, dos mil extranjeros afincados en la Comunidad foral, de los más de 20.000 residentes (un 3% de la población total), continúan esperando que se resuelva la tramitación de sus papeles y las ONG que trabajan con ellos denuncian que la situación administrativa sigue siendo grave.

Cáritas, Cruz Roja, Anafe-CC OO y el Centro Guía de UGT de Navarra rompieron en octubre de 2001 todas sus relaciones con la Delegación del Gobierno en Navarra para denunciar el caos y la paralización burocrática que afectaba a los procesos de regulación de inmigrantes en Navarra. Tres mil expedientes se amontonaban en los despachos sin resolver. Once mil de los extranjeros que viven y trabajan en Navarra están en situación irregular.

El Departamento de Bienestar Social del Ejecutivo de UPN actuó entonces de mediador entre ambas partes, a pesar de las reticencias iniciales de la delegación gubernativa, y logró la constitución de una comisión técnica encargada de resolver el embrollo. Cinco meses después, y todavía con 2.000 expedientes sin resolver, la comisión no ha sido convocada.

La Delegación del Gobierno en Navarra estima que debe ser el Gobierno foral quien tome la iniciativa de la reunión, pero éste ha señalado, a través de su consejero de Bienestar Social, Calixto Ayesa, que es la Delegación la competente para resolver el papeleo atrasado. Ayesa ha recordado que el delegado José Iribas prometió tener todos los expedientes resueltos para agosto.

Las organizaciones no gubernamentales han vuelto a denunciar la situación y la Delegación del Gobierno asegura que en dos meses se resolverán los expedientes. Además de contratar a tres funcionarios más para agilizar el proceso, la delegación abrirá en Pamplona una nueva oficina específica donde centralizará todas las secciones vinculadas a la inmigración (área de Trabajo y sección de Extranjería de Policía Nacional).

De los 20.500 extranjeros residentes en Navarra, 13.200 tienen permisos de residencia; la mayoría de ellos procede de Latinoamérica y el Magreb, concretamente de Ecuador y Marruecos. La última regularización se realizó en junio de 2001 y alcanzó a 3.000 personas, pero se calcula que desde la entrada en vigor de la nueva Ley de Extranjería han llegado a Navarra más de 5.000 extranjeros que carecen de papeles y de cualquier posibilidad de obtenerlos. Las ONG recuerdan que los inmigrantes pueden tardar entre tres y cinco años en regularizar su estancia, un periodo en el que carecen de muchos derechos y pueden ser víctimas de la explotación laboral y las mafias.