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OPINIÓN DEL LECTOR
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Estatua en Torrremolinos

Al llegar a Torremolinos me topé de frente con una enorme columna de más de 20 metros de altura, y una señora medio en cueros encima. Se trata del monumento al turista. Pero, ¿qué han hecho los turistas para merecer eso?

No he logrado enterarme si el alcalde de Torremolinos ha tenido mucho que ver con el diseño, pero parece que un promotor que vino de turista a Torremolinos le ha regalado al Consistorio el monumento, supongo que por lo bien que se lo ha pasado en el municipio, ora bañándose en sus lindas playas, ora construyendo una de esas promociones que dejan ahora más beneficio que la Bolsa. Al mecenas, cordobés para más señas, le han puesto su nombre en la calle. No he podido averiguar qué méritos hay que reunir para que en Torremolinos te pongan un nombre en una calle. Sí que sé que cuando entró Pedro Fernández Montes como alcalde se apresuró a quitar el nombre de Pablo Picasso de una plaza principal. Pero claro, Picasso no había promovido viviendas en el pueblo y quizás para el alcalde no fuera lo suficientemente conocido.- Francisco Bóveda Guerrero. Torremolinos (Málaga).

El alcalde ya tiene una columna de 20 metros de altura. Su frustración por no haber conseguido llenar de columnas clásicas el actual Ayuntamiento modernista, destrozándolo a pesar de ser premio de arquitectura, ha sido compensada en parte con esta asombrosa columna conmemorativa donada por un cordobés.

Y digo cordobés porque para mí es muy bochornoso que el origen de este pastiche (similar al Triunfo de san Rafael de los Boliches del mismo donante) sea una burda imitación del Triunfo de san Rafael en Córdoba, obra del escultor franco-español y tatarabuelo por parte de madre: Juan Miguel Verdiguier.

Es terrible para la tesis doctoral que preparo desde hace tres años sobre mi antepasado que este 'ecléctico neo seudotriunfo' sea heredero de aquella obra barroca cordobesa del siglo XVIII, que aunque poco afortunada en su diseño -ajeno al escultor-, sí fue dirigida, ejecutada e inaugurada en 1781 por él.

Este 'monumento al turista', aunque difícil de definir, está estructurado desde su base con motivos faraónicos y ánforas desde donde se eleva una monstruosa columna de fuste acanalado y capitel seudocompuesto que, a su vez, a través de la figura de dos delfines, soporta una alegoría femenina en bronce de 2,5 metros, que debido a su altura es difícil de evaluar.

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Torremolinos puede estar orgulloso de esta obra porque pone la guinda a ese lindo pastel con que el alcalde ha querido hermosear nuestro pueblo. Las numerosas fuentes prefabricadas con colorines, el turístico tanatorio y el desmochado quiosco de música, unido a la columnita de marras, proyectarán hacia el futuro la calidad, el gusto y la cultura de los dirigentes torremolinenses del recién inaugurado siglo XXI.

Quiero felicitar la genial idea de premiar con una calle esta donación, valorada en 100 millones de pesetas por el desinteresado constructor. ¡Son cosas que no se ven todos los días!- Antonio Gómez Guillamón Maraver. Torremolinos (Málaga).

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