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Barcelona registró en 2001 el menor número de casos de sida desde 1987

La prevalencia de la enfermedad en mujeres se cuadriplica en 17 años

Miquel Noguer

Poco a poco, y gracias a los fármacos antirretrovirales, la incidencia del sida vuelve al nivel de los estadios iniciales de la epidemia en Barcelona. Después del fatal trienio 1994-1996, en el que se diagnosticaron hasta 700 casos por año, 2001 se cerró con cerca de 130 nuevos enfermos, algo que no se veía desde 1987. Las mujeres ya representan el 23% del total de nuevos enfermos, cuatro veces más que en 1984.

El primer caso de sida diagnosticado en Barcelona, que a su vez fue el primero de España, data de 1981. Lo que en aquel momento fue considerado un caso aislado de una rara enfermedad atribuida a homosexuales y hemofílicos, acabó por convertirse en una auténtica epidemia cinco años más tarde. Desde 1981, 7.913 personas han sido diagnosticadas de sida en la capital catalana.

Sin embargo, el paso de los años ha cambiado muchas cosas. Aunque los hombres -tanto homosexuales como heterosexuales- siguen siendo los más afectados por la enfermedad (81%) de los casos, los últimos datos confirman que las mujeres son cada día más vulnerables al sida. De hecho, el 23% de los nuevos casos diagnosticados en los primeros cuatro meses de este año corresponden a mujeres. Así lo afirma un informe del Instituto Municipal de Salud Pública de Barcelona, según el cual en 1984 las mujeres apenas representaban el 6% de los diagnósticos de sida.

A lo largo de este periodo, la tasa de incidencia más elevada (1.334 casos por cada 100.000 habitantes) la presentó el distrito de Ciutat Vella, con una incidencia tres veces superior a la del resto de la ciudad. Pero no sólo las áreas más degradadas del centro de la ciudad sufren el impacto del sida. Algunas zonas de Nou Barris, así como Can Tunis y el Polvorín alcanzan tasas similares.

La categoría de transmisión más frecuente es la de los usuarios de drogas, que representan la mitad de los casos, si bien se observa una disminución importante desde 1994. Los hombres que practican sexo con otros hombres representan el 27% de las nuevas infecciones, índice que está volviendo a crecer a causa de la relajación de los mecanismos de prevención por parte de un sector del colectivo homosexual. Quien también está relajando sus costumbres de prevención es el colectivo heterosexual, que representa el 15% de las nuevas infecciones. Uno de los éxitos de la medicina en los últimos años ha sido, sin duda alguna, el haber evitado los contagios por vía perinatal (de madre a hijo). En los últimos dos años no se ha registrado ningún caso de este tipo en el conjunto de Barcelona. Ahora, uno de los colectivos de riesgo es el de los inmigrantes, que a menudo llegan de países donde la epidemia sigue sin estar bajo control. El año pasado, los extranjeros representaron el 16% de los nuevos casos, el índice más elevado desde el comienzo de la epidemia.

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Sobre la firma

Miquel Noguer
Es director de la edición Cataluña de EL PAÍS, donde ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional. Licenciado en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona, ha trabajado en la redacción de Barcelona en Sociedad y Política, posición desde la que ha cubierto buena parte de los acontecimientos del proceso soberanista.

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